Depredadores, 3 de octubre de 2014

Publicado el 07 febrero 2016 por Roberto Dominguez @robertodom1974
"El escándalo de pedofilia en Boston marcó un antes y un después en la Iglesia católica. Hasta entonces, los casos conocidos de curas abusadores de niños se sustanciaban del mismo modo: con el alejamiento del sacerdote de la parroquia en cuestión, su traslado a otro lugar, y una pequeña indemnización -en Estados Unidos jamás superaba los 20.000 dólares- para las víctimas, a quienes se obligaba a firmar un estricto acuerdo de confidencialidad.
Los abusos se enterraban en el armario y el abusador, después de un período de 'descanso', volvía a ejercer en otro rincón del país. ¿El resultado? Monstruos como el padre Geoghan, que abusó de decenas de niños en distintas localidades del país, de un modo sistemático y con total impunidad.
No resulta difícil establecer paralelismos entre la historia que cuenta Spotlight y los escándalos que han azotado a otras diócesis en Estados Unidos, Austria, Irlanda, Australia, Alemania, Italia, India, Kenia... o España, donde aunque las condenas a sacerdotes abusadores apenas superan la docena, también se han dado condenas a las diócesis como responsables civiles subsidiarios. El mismísmo cardenal Rouco fue condenado como tal al demostrarse que actuó de forma imprudente en un caso de abusos a menores, denunciado por el que hoy es concejal de Economía y Hacienda del Ayuntamiento de Madrid, Carlos Sánchez Mato."

Para ver el texto completo de la noticia publicada en Diario.es el 3 de febrero, pincha aquí: El cardenal que encubrió a los curas pederastas del filme 'Spotlight' vive protegido en el Vaticano