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Desenlace
Publicado el 06 noviembre 2009 por Ramongilmargin-left:1.6in;margin-bottom:.0001pt;text-indent:.0in;line-height:20.0pt;
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margin-left:1.6in;margin-bottom:.0001pt;text-indent:.0in;line-height:20.0pt;
mso-line-height-rule:exactly">El niño es niño que quiere las alas con las que vuelan
las serpientes naranjas, las serpientes
suicidas con alas redondas, con alas de menos,
sin manos, sin mamás
que preguntan ¿por qué?
Ellas, las mamás, tienen pies y tienen miedo de los puentes
pero son las que con más mimo hacen su niño y su calceta:
un jersey pequeñito, una chaqueta sin botones,
unos guantes de dos alas.
Pero preguntan, preguntan ¿por qué?
¿Por qué
el niño no merienda su corteza de pan
y su manzana? ¿Por qué
más tarde con las migas
hace gritos, hace puentes entre las palomas,
hace crucigramas de gritos?
El niño crece sin remedio
y cree sin cerrar los ojos.
El niño niño desordena las causas,
terco:
Va a venir el hombre del saco.
Va a venir, ya viene.
El niño tiene muchos silencios,
cada grito es un silencio.
¡Silencio!
Va a venir el niño del saco.
Va a venir, ya viene
a rescatar al niño niño.
¡Zas!
El niño del saco corta las alas,
las corta justamente.
Da su manzana ¿A quién el corazón
de su manzana?
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Ilustración: Victor Ekpuk, Child in the Wilderness, 2006
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