Adornado con disfraz conveniente
Ese hablar sin guía ni objetivo fijo
En tanto ejecuto mil sutiles paradas
Retornar a las mañanas de domingo
Como haciendo taller de autoestima
Renovar la decoración de tanta ruina
Con barnices nuevos de efímero brillo
A pesar de este crónico desánimo mio
Reitero mi razón para buscarte ahora
Insistiendo para ello en las virtudes
Tuyas y mías, olvidando los errores
Que nos han llevado hasta dondeMora la luz de nuestro encuentro