Tamara con su hijo en una comunión familiar A partir de ahora, y más o menos una vez por semana, Tamara nos contará su día a día en diálisis. Nos relatará cómo se siente, cómo son sus sesiones, lo que hace mientras tiene que estar cuatro horas depurando su sangre, sus anécdotas y las de sus compañeros .......... Seremos espectadores y nos acercaremos a su mundo entre máquinas, camas, enfermeros, tensiómetros .....Y ahora yo me callo para que Tamara nos empiece a contar: Semana del 21 al 25 de Mayo: Hola me llamo Tamara y llevo 4 años en hemodiálisis, estoy aquí para contaros que esto no es tan terrible como se piensa o como nos dicen algunos, es un tratamiento temporal mientras nos llega nuestro ansiado tesoro, un trasplante, por eso os voy a contar lo que yo hago una semana normal de diálisis. Lunes, primer día de la semana, es mas común llegar más cargado de peso, y mas aún cuando has tenido un fin de semana movidito como es mi caso, aunque no hay que descuidarse ni sobrepasar limites pues es nuestro cuerpo el que lo sufre. El sábado estuve en una comunión familiar me reí mucho, bailé y me lo pasé muy bien; el domingo teníamos una barbacoa programada con los compañeros de diálisis. Esto se traduce en 4 kilos de peso el lunes. En estos días se habla de reducciones de personal por la crisis, pero también nos hacemos muchas bromas, tengo que decir que soy la más joven de las mujeres que hay en mi turno y quizá también en general de todos los turnos del centro donde yo me dializo, por eso me llaman "la niña". Una enfermera en particular, bromeaba ese día con mi compañero de al lado, hablaban de las ganas de, a las 8 de la tarde que eran y con la calor que hacia, de haber bajado al bar a tomar una cerveza fresquita y yo me auto-invité. Entonces haciendo referencia al apelativo cariñoso que me tienen se metían conmigo en broma diciendo que las niñas pequeñas no podemos beber, que como mucho un sorbo. También he hecho muchos amigos entre los conductores de las ambulancias que también tienen la incertidumbre de que va a pasar con el pago del servicio. Otra cosa que suelo hacer en diálisis, además de llevarme mis chupa-chups, es que, cuando mi compañero no utiliza su libro de sopas de letras, me lo presta y así me entretengo, y la verdad es que las 4 horas pasan volando. Me siento muy querida y muy a gusto con todos ellos ya que me tratan muy bien. Cuando llega algún compañero nuevo que se une a nosotros intento que no se encuentre solo, me gusta hablar con la gente para que, al igual que yo, se sienta como en casa; intento animarle y que no se sienta en sitio extraño, se lo que se siente llegar a la máquina y encontrarse solo y sin conocer a nadie y como considero que no es bueno, intento que los demás se integren lo antes posible. Ahora me ha dado por la fotografía, animada por un enfermero que es especial para mi. Cuando no voy a la máquina y mientras mi hijo está en el cole salgo a darme paseos con mi cámara y hago fotos, busco sitios nuevos..... es un mundo que me ha encantado desde siempre pero que ahora como tengo más tiempo libre puedo desarrollar. Hay que buscar el lado positivo de las cosas siempre, y en mi caso, es tener mas tiempo libre. ¡Todo no iba a ser malo! El Doctor también bromea conmigo. Él me trato en la planta cuando caí enferma y aunque no nos lo decimos tenemos un cariño especial el uno por el otro. El caso es que la otra noche al llegar a mi posición para ver como me encontraba le dije que estaba afónica y que a ver si podía mandarme algo para que se me pasara, y me dijo muy serio que a las mujeres nos dura mas la afonía, porque para eso lo recomendable es estar callados y eso en una mujer es más difícil... me río mucho con él. El miércoles ya viene uno de otra forma, no traes tanto peso y la diálisis se pasa un poco mejor. Al llegar nos encontramos con que un compañero había adelantado la diálisis porque estaba probando una máquina nueva..... ¡Guau! Apenas hace ruido, es la evolución de una máquina que tenemos y estaban viendo a ver como funcionaba. Esa noche tuvimos que dar la bienvenida a nuestra doctora Elena, hacia tiempo que no la veíamos. También nos cuidamos entre nosotros y por poner alguna referencia....el lunes una de las enfermeras tenia vértigos y estaba allí trabajando, esa noche no alborotamos mucho y la cuidamos para que estuviera más relajada; normalmente, contamos chistes, o Edu, un compañero, nos deleita con historias de miedo espeluznantes, o debatimos sobre política, pero siempre nos reímos mucho y estamos pendientes, en cuanto alguien se siente mal damos la voz de alarma y enseguida nos atienden. El viernes cuando llegué......¡¡Sorpresa!! las sábanas rotas.......La auxiliar a modo de risas había puesto "RECORTES" entre los dos agujeros que tenía la sábana... También llevo toda la semana con la cama rota, no baja, ahora soy como el vigilante en lo alto de la torre, jajaja,....estuvimos viendo el partido del Barcelona y uno de nuestros compañeros celebrándolo porque es del Barcelona hasta la médula y ese día venía por supuesto uniformado con los colores de su equipo. También comentamos la falta que nos hace irnos al nuevo hospital pero todavía no está eso a la vista, ya que no pueden acondicionarlo para que podamos trasladarnos, que falta nos hace. El hospital clínico se cae a pedazos y cualquier día la sala de diálisis va a caer encima de la sala de encamación de la planta de abajo. Bueno esta es una semana normal en diálisis para mi, lo he pasado bien, sobre todo al ver a mis compañeros y al personal, cada uno con nuestro tema y siempre todos...... compañeros. Tamara Fernández Ana Hidalgo |