Hola! Hoy vuelvo al blog. Comenté por Twitter que estaba un poco desganada este año, entre las tiendas (que ya van 3) y todo lo que esto supone entre preparar diseños, crear nuevos productos, packaging, etc,... pero voy a intentar aunque sea una vez a la semana traerte algo nuevo por aquí.
En el post de hoy te enseño un DIY que he regalado esta Navidad.
Hace unos años me tocaron unas cajas de madera en un sorteo y sólo había utilizado una de ellas, la que convertí en caja para mantas. Este año me pareció un buen regalo convertir otra de ellas en caja para los juguetes de Nucky, el perro de mi hermano (si quieres conocerlo vente a su Instagram).
Antes de montarla hay que pintarla de blanco, ese es el color del mobiliario y así queda todo con los mismos tonos. Ya sabes que yo soy de las que pinta los muebles con pintura de pared (es similar al chakl-paint) con dos capas por la parte exterior y una en la interior basta.