¡Domingo! El final de mi corto descanso universitario, luego de...

¡Domingo! El final de mi corto descanso universitario, luego de una asquerosa semana llena de textos que leer.

Ayer, sábado, no hice mucho, descansé casi todo el día, entre que ordenaba mi pieza y botaba muchos cuadernos y papeles antiguos. Hoy, en cambio, mi día comenzó muy temprano, eso gracias a Louis Tomlinson, quien jugaría en un partido de fútbol por beneficencia supuestamente a las 8:30 AM hora chilena; desperté a las 8 para verlo tranquilo en el link que tenía guardado (incluso dejé un recordatorio), y mientras esperaba y nada pasaba, me di cuenta de que gracias al cambio de hora lo podría ver a las 9:30, y de que era en otro link. De hecho, no pude verlo, porque salí a las 11 para juntarme con la Xinmin en Los Héroes, y para entonces Louis aún no salía. Por lo que leí luego, lo golpearon mientras jugaba e incluso vomitó (y estuvo su novia la barba con él ahí). En la mañana también me enteré de que Lana Del Rey estará en el Indie Fun Fest el 12 de noviembre, festival al que iré y para el cual ya tengo el dinero; las entradas se comienzan a vender mañana e iré apenas salga de clases a comprar la mía.

Mi día junto a la Xin fue, como ella misma lo calificó, productivo. Llegamos al Costanera, y lo primero que hicimos fue ir en búsqueda de una tablet rosada para su hermana (what the…), cosa que, como es de esperar, no encontramos. Posterior a eso fuimos por un smoothie (ella) y un milkshake (yo) al ChurroPremium del mall, una mala inversión teniendo en cuenta que no me lo terminé porque estaba muy dulce (escogí Nerds). Luego de estar un rato sentados tomando nuestras ¿bebidas? nos fuimos a mirar ropa, y H&M; me decepcionó, la nueva colección no es lo que esperaba, no había pantalones skinny y las tallas que quedaban eran enormes; por eso sólo me compré una polera, bastante simple y, luego de almorzar, en París / Foster me compré un pantalón de un color bastante particular.

Almorzamos en el WOK. Amo sus WOK Rolls. Compré una nueva carcasa/protector para el iPhone (gasté 20 mil pesos en eso .___.) y luego fuimos a Starbucks, donde nos tomamos un Iced Shaken Lemon Tea Green cada uno, sentados un rato adentro, mientras yo cargaba mi celu, y otro rato afuera, donde me terminé de enamorar locamente (eso equivale a que me gustó mucho) de alguien que estaba adentro. Luego de Starbucks fuimos a dar una última vuelta, en la cual compré el pantalón.

El regreso a casa fue en colectivo, muy lento e incómodo. La joven que iba a mi lado se puso a oír bachata con el altavoz de su teléfono, menos mal que yo llevaba audífonos; y el colectivero entró en los sectores malos y peligrosos de San Bernardo (entre broma y verdad puse en Twitter que esperaba un balazo en cualquier momento), llegué muy mareado a casa.

Ahora iré a ducharme y a preparame para otra semana (sólo) un poco más relajada.