Esto es lo que nos deparó el año 2012, que en paz descanse.
enero-febrero
Como viene sucediendo en los últimos años después de las fiestas navideñas, los primeros meses fueron de poco viajar, trabajar en Valencia y disfrutar del clima fresco pero suave de la ciudad en estos meses. Un clima perfecto por ejemplo para hacerles una visita a los gatos del Jardín Botánico, hacer macarons sin la humedad mortal del otoño o rememorar viajes pasados (ay, Hawai).
Gato del Jardín Botánico de Valencia
La "batalla macarónica" se puede vencer.
Además, estos meses son siempre meses de mucho cine, en preparación para la ceremonia de los Oscars, una excusa más para ver pelis.
marzo Este mes por fin visité uno de mis destinos nacionales pendientes, de esos que me daba vergüenza decir que no había visitado: Granada. Fuimos en tren-hotel desde Valencia, una experiencia muy divertida que recomiendo, porque llegas a la ciudad de buena mañana ya descansada (¡y porque me encantan los trenes!). Pero también dio tiempo a hacer alguna excursión por la comunidad para visitar sitios tan bonitos como Villajoyosa, en la costa alicantina. Además me quedé en Valencia para Fallas (cosa que no hago todos los años) e intenté disfrutarlas lo mejor que pude, como demuestra este post. ;)
Falla Calle Sueca
Villajoyosa/La Vila Joiosa
abril
En abril regresé a París gracias a la invitación de una buena amiga (merci Pauline !) y menos mal, porque ya hacía *12 años* que no había estado (con esto de vivir al otro lado del charco tantos años se me hacía un viaje muy largo... pero ya no había excusa). Este fue un viaje muy bonito porque pudimos descubrir cosas nuevas de la mano de amigos locales, como le marché d'Aligre, le 11è arrondissement, bistros de barrio, y cómo no, también hice mi particular cruzada del París más dulce.
Galerie Vivienne, Paris
Marché d'Aligre
mayo-junio-julio
El mes de mayo fue un descanso de viajes para preparar todo el movimiento que venía en verano. En el blog todavía aparecía algún "recuerdo" de mi viaje a Francia el mes pasado, como este post sobre Versailles, que visité por primera vez.
A finales de junio hicimos las maletas de nuevo, esta vez para un viaje más largo: cinco semanas en EE. UU. La "base de operaciones" estaría en Washington D.C., pero de allí iría a Delaware, Austin y San Diego.
National Portrait Gallery, D.C.
Coronado Beach, California
The Salt Lick BBQ, a las afueras de Austin, TX
En D.C. ya había vivido un tiempo antes y había visitado en varias ocasiones, pero este mes pude volver a sitios favoritos, visitar de nuevo excelentes museos como este y este, y además disfrutar de la celebración del 4 de Julio en la capital, un espectáculo siempre impresionante (aunque el calor de ese año batiera récords).
Cogiendo sitio en el Lincoln Memorial para los fuegos artificiales del 4 de Julio
agosto
A diferencia de otros años, este agosto sí salimos de vacaciones. Porque, aunque no lo parezca, los viajes de junio a julio no fueron todo diversión. ;) Como freelancer yo me llevo el trabajo a cuestas a TODAS partes. Pero en esta ocasión decidimos que había que desconectar de verdad y por fin dejé el portátil en casa para disfrutar al 100% de los Pirineos oscenses.
No hace falta decir que el viaje fue una maravilla. Dos semanas de senderismo por la zona del precioso Valle de Tena y Ordesa. Casi nos da algo al volver al calor húmedo de Valencia la última semana de agosto, aclimatados ya al calor seco y las noches fresquitas de la montaña. Nos dieron ganas de volver inmediatamente. :)
Pero como no podía salir más redondo el mes, a finales de agosto volvimos a París. Parece que después de tanto tiempo sin visitarla estábamos aprovechando el tiempo perdido. Seguimos disfrutando de la ciudad unos días más, visitando sitios nuevos como el interesante cementerio Père Lachaise y descubriendo que todas las ciudades huelen en verano, incluso Paris.
septiembre
Tras volver de París a principios de mes, septiembre fue un mes casero. Se hacía raro no haber estado en Valencia casi en verano, así que este mes había que disfrutar de la ciudad y relajarse... antes de dejarla otra vez en octubre.
Mientras tanto cociné bastante y descubrí un par de recetas nuevas que me encantaron: este batido de vainilla y coco y una tarta de chocolate con peras al vino impresionante (yo me lo digo todo).
octubre
Otra vez a hacer las maletas: esta vez para pasar cinco semanas en Viena. Antes solo había estado unos días de visita, hace muchos años, así que era una oportunidad genial (por trabajo) para conocerla mejor. Como os fui contando desde allí, Viena es una ciudad hermosa con café excelente, buen chocolate y dulces, edificios y exposiciones interesantes, y un otoño que luce en todo su esplendor por sus parques y jardines.
Y como había que aprovechar que estábamos en el extremo oriental de Europa, a finales de mes cogimos un tren para pasar un par de días en Budapest, que no conocíamos. Una ciudad interesante a la que me gustaría volver para seguir descubriendo.
noviembre-diciembre
Al volver de Viena a principos de noviembre, y ya con el clima adecuado en Valencia, cogí la repostería con fuerza y me puse manos a la obra con varias recetas que tenía pendientes, como esta tarta de calabaza y estos panecillos que hice para Thanksgiving o estas chocolate chip cookies que se han convertido en favoritas en mi casa. Además, en noviembre "lancé" por fin mi tienda Etsy Chic Cotó, que os presenté "oficialmente" con este post.
Estos fueron unos meses de celebraciones familiares, como toca, así que los viajes fueron pocos, aunque sí hubo alguna escapadita a la naturaleza cercana, como a nuestra querida Sierra de Gúdar en Teruel.
Espero que hayáis comenzado el año con buen pie, y que sólo vaya a mejor. ¡Gracias por estar ahí! ***