Todo este tiempo he notado tu ausencia en el “insti”. Cuando nos dejaste, la directiva movió las mesas de lugar, tu despacho ya no es como tú lo conociste, hubo muchos cambios. Estamos bien, la persona que ocupó tu cargoes maravillosa, y lo hace estupendamente, pero....yo te echo de menos.
Me ayudó muchísimo Josep a llevar tu ausencia, después de compartir aquellos amargos días, se convirtió en mi amigo, me ha estado apoyando estos años, pero....yo te sigo echando de menos. Viví todas las etapas del duelo, primero me negaba a creerlo, después estaba cabreada, no quería admitir que te hubieras ido, más tarde pasé una gran depresión, lloraba por cualquier cosa, y por último la aceptación, etapa en la que por fin estoy.Ahora después de dos años no puedo decir que me acuerde de ti cada día, pero....te echo mucho en falta.Sabes Antonio?He conocido a muchas personas, he llegado a tener mucha confianza con Josep, una persona maravillosa,al cual debo agradecerle que estuviera a mi lado cuando tu te marchaste, pero ... tú eras diferente, nuestra amistad fue muy muy especial, hablábamos de todo, nos contábamos las cosas, compartíamos vivencias, me regañabas,nos enfadábamos, pero lo más bonito de todo, es que nos queríamos mucho, como dos grandes amigos, sin ningún otro matiz más.Antonio, estés donde este yo siempre me acordaré de ti.