Ya teníamos bien instalada la rutina de "antes de dormir", y un horario apropiado de sueño, incluyendo la siesta diurna; pero en las últimas dos semanas, B ha estado durmiéndose tarde; hoy nos devolvimos al buen camino, y no fue miel sobre hojuelas.
Así pasa con otras cosas también. Creí que habíamos superado el gusto por morder, y regresó con brío.
Sé que el desarrollo es una espiral. Que el movimiento que parece retroceso es importante para avanzar. Me gusta saberlo.
Silvia Parque