Ahora navego en dos realidades distintas, no distingo la claridadde la oscuridad,ni la verdad de la mentira. Hay luces aún con el sol apagado, almas que navegan por doquier sin tener un pasado. El futuro se perdió en el mañana que nunca llega, el presente no es bienvenido, ya que nadie lo conoce. Las prioridades están dadas por las autoridades, de existir Zeus y Hades compartirían cuarto y Las Moiras perderían el trabajo, Cloto, la única de las hermanas que tendría juego en esta vida; Láquesisexpiraría a manos de Átropos y, ésta, se suicidaría por apatía.
Presurosos pensamientos llenan mi testa, incontrolables... ¿soy yo quien piensa? ¿O es el pensamiento de ellos los que hacen mi pensar? ¿Dudo de mí o de él? ¿Yo soy o él es? ¿Soy yo él? Somos demasiadoslos que completamos un ser. Es parte de mi condena. Navegar y navegar en un mar de pensamientos tan distintos entre sí como parecidos. Es un mundo de desiertos y océanos, de espejos y ventanas, de erroresyObedecemos a semejantes desde prominentes tronos, mas obedecemos por miedo a miedosineludibles. La deidad taimada que gobierna no quiere dudas y te destierra, no deja que nadie haga hendiduras a un sistema trabado y calculado. Una coyuntura y serás desterrado. Tendrás que pensar por ti mismo. Ya no serás controlado.