Con este óleo tan apropiado de Bill O´Brien encabezo este post acerca de Dublín.
Vamos a poner banda sonora con los High Kings, con música que podéis escuchar en cualquier pub de Dublin...
Ya me habían comentado de esta ciudad solo bonanzas, no solo por su arquitectura sino también por su abanico cultural que se ofrece a los visitantes, por sus pubs antiguos lleno de todo tipo de gentes que concluyen en ellos para escuchar buena música y relacionarse pero aún así,... quedé totalmente impresionado a cada paso..., cuestión de sensaciones...
Música en las calles...
Los mejores rincones dentro de sus Pubs...
...para descansar y deleitarnos con cualquiera de sus cientos de tipos de cerveza tras un paseo por sus calles...
Os aconsejo reservar un guía (bastante económico) para dar un paseo a pié por los sitios más importantes de Dublín, la primera mañana que paséis en esta ciudad para así haceros un buen croquis de lo que en ella se ofrece y quedaros con lo que más os guste para volver luego por vuestra cuenta y disfrutarlos a vuestra manera..., el Trinity College, la fábrica Guinnes, un espectáculo con cena y baile típico irlandés, un paseo en bici por sus calles,... y por las tardes, comenzar disfrutando Pub a Pub, sorbo a sorbo de su ambiente...
No debe faltar una excursión de medio día, cómoda a la mágica Glandelough...
con almuerzo incluido en el Johnnie Fox...
Ah, y antes de ir, no olvidaros de aprenderos la famosa canción de Molly Malone para cantarla como si fueseis un Dublines más,... siempre cae...
Yo os dejo esta pequeña ventanita desde donde, humildemente, os muestro lo que yo pude captar con mis propios ojos de esta tierra tan sencilla y mágica a la vez...
Un saludo amigos y seguid soñando...
Miles.