Todos sabemos que en la dieta Dukan el aceite de oliva está totalmente prohibido salvo en la última etapa de la dieta. Para mi ésto fue un fastidio porque hacerme una ensalada de lechuga, tomatitos y quesito blanco con atún y no poder ponerle aceite de oliva era como comer césped.
Al principio de la dieta a mis ensaladas les ponía vinagre y el famoso aceite de parafina, después dejé de ponerle el aceite de parafina porque me resultaba asqueroso. Yo le daba mil vueltas a la cabeza para determinar si ponerle un poco de aceite de oliva era o no romper mucho la dieta y como siempre que tenia una duda de índole alimenticia o médica acudía a mi amigo médico para que me diese sus sabios consejos.
Me dijo que el aceite de oliva es muy calórico, pero que prescindir de él en una dieta es una temeridad y absurdo porque una cosa era limitar su uso y otra bien distinta ni probarlo. Me explicó detenidamente los beneficios del aceite de oliva:
- Contiene vitamina E: que previene de la oxidación del colesterol malo LDL, lo que daría lugar a la aparición de placas de ateroma o arterioscleróticas, que impiden el correcto flujo sanguíneo a través del sistema arterial. Por su contenido en vitamina E y el efecto antioxidante de ésta sobre la membrana celular, el aceite de oliva está especialmente recomendado para la infancia y la tercera edad.
- Polifenoles: poseen una acción antioxidante, previene el envejecimiento celular y también la formación de sustancias cancerosas.
- Grasas monoinsaturadas: ayudan a reducir los niveles de LDL-colesterol o colesterol malo
- En las personas diabéticas ayuda a rebajar los niveles de glucemia, por lo que necesitarían menos cantidad de insulina.
- Ayuda al endurecimiento de los huesos, lo que beneficia mucho a las personas adultas
- Evita la sobreabundancia de colesterol y ayuda a la asimilación de grasas, ya que favorece la síntesis hepática de sales biliares.
- Reduce el ácido de la mucosa esofágica, frena y regula el vaciado del estómago al duodeno, y desciende la acidez gástrica, por lo que se reduce el riesgo de la aparición de úlceras gástricas.
- La cantidad de ácidos grasos satisface totalmente las exigencias nutricionales.
- El aceite de oliva, tanto el virgen como el extra, son ricos en vitaminas A, D, E y K. Favorece la absorción de minerales como el calcio, el fósforo, el magnesio y el zinc; es eficaz en el proceso digestivo, evitando la acidez gástrica y facilitando el tránsito intestinal[cita requerida]. Mejora el control de la presión arterial. Ayuda a controlar el nivel de glucosa en sangre (véase glucemia). La elevada cantidad de polifenoles (un antioxidante natural) en el aceite de oliva ayuda y previene enfermedades degenerativas como el Alzheimer, y actúa contra el envejecimiento[cita requerida]. Reduce el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares, aumentando el HDL o colesterol bueno. Por su composición en ácidos grasos, el aceite de oliva virgen o extra es el alimento más similar a la leche materna
Mi amigo me dijo que usara poco aceite de oliva, pero que no prescindiese de él. Me recomendó usar un biberón para servir el aceite en la ensalada porque así se pone poquita cantidad pero que muy bien repartida y la ensalada gana en sabor y nosotros en salud.
No recuerdo dónde lo compré, me costó un euro y pico. Así me tiré a la piscina y decidí añadir aceite de oliva a la ensalada, un simple chorrito para darle sabor. Amigos, quien quiera creerme que me crea y el que no me da igual pero yo seguí perdiendo peso igual que antes de usar el aceite de oliva. Echaba un chorrito con el biberón, mas o menos viene a ser una cucharada sopera bien repartida por toda la ensalada ( al poner tan poco aceite hay que remover mucho para que se extienda bien ). Ésto lo hacia unas tres veces por semana.
En fin, cada uno que actué en consecuencia. Me quedo con la frase de mi amigo médico- “mejor perder 50 gramos menos a la semana pero ganarlos en salud”.
Espero os haga pensar este artículo. Saludos amigos.