Todos estamos de acuerdo con que el agua es un recurso imprescindible para la vida.
¿Cómo funciona esto para mí?
En Italia el agua que sale del grifo es potable, eso quiere decir que si tomo directamente esta agua no tendré problemas, porque está libre de sustancias nocivas que pueden ocasionar daños a la salud.
Es un agua constantemente monitoreada, apta para el consumo humano, incluso si la tomas de las fuentes ubicadas en espacios públicos.
La mayoría de los habitantes entre los que me cuento no sienten confianza en tomarla. Por lo tanto, esta agua se emplea para cualquier otro uso doméstico.
¿Cómo se toma el agua en Italia?Una gran parte de los italianos toma agua con gas, otra parte sin gas. Así que, es natural encontrar ambas versiones en casas y diferentes establecimientos comerciales.
De acuerdo a unas estadísticas recientes, Italia está entre los primeros países en el mundo en consumo de agua mineral en botella.
Ante la desconfianza y la accesibilidad de las botellas de agua, se procede a la compra, aunque eso represente la incomodidad de cargar al mes siete paquetes de seis botellas cada uno y de desechar tales cantidades de botellas generalmente plásticas.
Un elemento presente y no poco en el agua es el calcio, lo que la hace bastante dura dejando residuos a su paso, parecido al yeso. Los accesorios en casa como metales, vidrios y otras superficies hay que limpiarlos constantemente con productos limpiadores especialmente para este problema.
Su paso por la piel y el cabello no es inofensivo, los cuales deja secos y opacos, para combatirlo otros productos, en este caso hidratantes.
Su paso por las tuberías es tan agresivo que puede obturarlo, para combatirlo el plomero o fontanero. Ahora bien ¿Qué dejará esta agua potable en nuestro cuerpo? ¿Emergerá de aquí la desconfianza de tomarla? Yo creo que sí.