El Arte de la Observación

Publicado el 06 octubre 2010 por Filossofo
El arte de observar es una de las capacidades más preciadas para un buscador del conocimiento, de hecho es uno de los grandes pilares de la ciencia moderna y es también un método en sí mismo; para cultivarlo, no hay quien le haga la competencia a las técnicas meditativas desarrolladas por el zen y por el budismo en general, sin embargo, estas requieren años de arduo entrenamiento, y si lo que estamos buscando es  un método que nos de resultados un tanto menos espectaculares pero más rápidos, podemos atender a un par de consejos para lograr mejorar nuestra capacidad de observación.

Preparación

Uno de los aspectos más importantes es el de estar preparado para observar lo que deseamos observar, debemos conocer sus características generales aún sí  deseamos observar como método de exploración, habremos de edificar nuestras observaciones sobre los datos anteriores obtenidos en la materia.
Un punto muy importante aquí es la palabra Hechos, y es que son lo único que nos ha de interesar como observadores, no nos deben interesar las opiniones ni las conjeturas, no hay nada más venenoso para la correcta observación de los fenómenos que los prejuicios
; aún cuando es verdad que nunca estarás libre de prejuicios, deberemos tratar de mantenerlos al mínimo en nuestro campo de interés. Por ejemplo, una persona que por una u otra razón quiera observar el comportamiento de las aves, se perderá de muchas interesantes observaciones si parte del prejuicio de que todas las aves vuelan, o que todas tienen su nido en la copa de los árboles; sus observaciones serán, sin duda, muy pobres y limitadas a las aves que desde el principio encajen con su idea de lo que es un ave.

El Análisis

Una de las más poderosas técnicas de observación conocidas es el análisis, el cual consiste en fragmentar el objeto de observación en las distintas partes que lo componen, así, si observo un auto, pensaré en cuales son las partes que lo componen: las ruedas, el chasis, el parabrisas, los espejos etc... A su vez realizaremos lomismo con cada uno de las partes que componen a estas partes, hasta reducir el auto a un grupo de partes que lo componen y que deben ser suficientemente simples en sí mismas para un análisis menos elaborado. Este tipo de observación tiene mucho que ver con como interactúan y se relacionan las distintas partes de un todo, con su funcionamiento y relaciones.

El Enfoque del Sabor

Esta técnica es posiblemente lo contrario o un complemento del análisis, ya que en ella consideramos al objeto de observación como un todo, sin descomponerlo en sus partes constituyentes, sino simplemente dejamos que su naturaleza reluzca a través de su estructura externa, para hacernos una idea de como funciona, en nuestro ejemplo del automóvil tendríamos que abrir la cajuela, observar el motor, y desintegrarlo en sus partes, mientras que el enfoque del sabor, no requiere de la intervención, sólo observamos el auto, de preferencia en funcionamiento, cómo se comporta en el mundo real?, cómo interactúa con otros autos?, se mueve por sí mismo, qué papel desempeña el conductor?. Todas estas preguntas suelen tener que ver con la manera en que el objeto observado se comporta en el mundo, sin atender demasiado a su mecánica interna.

El Nicho Ecológico

También se puede (y se debe) atender al papel que las cosas juegan en relación con otras cosas, a este conjunto de relaciones le llamaré nicho ecológico, y trata de observar las funciones que llevan a cabo las cosas o seres vivos, para entender así a las cosas mismas. Un buen ejemplo sería el intentar explicar qué es un martillo, rápidamente pensaremos en otra pregunta similar: Para qué sirve un martillo?. Incluso si estuviéramos ante nuestro primer martillo, sin haber visto uno con anterioridad, posiblemente tendríamos que pensar en su utilidad para entender su existencia.
Para terminar, debo señalar que no debe tomarse al pie de la letra cada técnica, como en muchas otras cosas, lo más efectivo es una combinación de lo que hay disponible, así que hay tantos métodos como observadores y como objetos de observación; Quizá el único punto imprescindible es el de dejar a un lado nuestras concepciones previas, so pena de terminar observándolas a ellas en lugar de nuestro objeto de observación.

Imágenes: