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El celo de la avutarda
Publicado el 09 abril 2011 por JesusgiraldogutierrezdelolmoTodas las fotos están realizadas en la Serena, gracias al estupendo trabajo que realiza en Grupo ANSER y Manuel Calderón, para la protección de las aves esteparias de esa importantísima zona de Badajóz.
EL CELO DE LA AVUTARDA (Otis tarda)
La Avutarda es el ave más pesada que vuela en nuestro planeta. No corresponde ese dato a la nuestra sino a la Avutarda de Kori, una especie del este de África, pero la que vive en Europa ostenta el record de ser el ave voladora más pesada del continente.
Los machos son mucho más grandes que las hembras, llegando a medir más de un metro de alzada y con una envergadura de alas de más de dos metros y medio. El peso de los machos adultos supera con facilidad los 15 kilogramos de peso llegando hasta los 18 Kgr.
Las hembras son mucho más pequeñas con 75 cm. de alzada y unos 4 Kgr de peso.
La librea es parecida en ambos sexos, con la cabeza y cuello gris plata, el pecho de color marrón leonado, más oscuro en los machos viejos y el dorso marrón leonado barreado de negro. Las zonas ventrales de blanco níveo con plumas anales negras. Los Machos el la época de celo tienen unos "bigotes" o "barbas" de color blanco muy caracteristicos.
España en el país europeo que más efectivos cuenta de esta especie, con más de 20.000 individuos. Sedentaria, pero que hace movimientos dispersivos bastante grandes (migradora parcial), sobre todo después de la reproducción.
En España está considerada como vulnerable A4c.
La distribución Ibérica es bastante dispersa, estando presente en el sur de Portugal, en Castilla León y Castilla La Mancha, Extremadura, Aragón, Andalucía y Navarra.
Vive en llanuras despejadas, de cultivos de secano y tiene una dieta omnívora. Son marcadamente gregarias durante casi todo el año, formando grupos unisexuales que se mezclan en la épca de celo.
En la época de reproducción las avutardas se reunen en Leks o arenas de reproducción. Esta especie tiene una fidelidad a estos lugares muy fuerte, volviendo año tras años a los mismos sitios a reproducirse.
Los machos se reunen en estos Leks y compiten entre ellos en exhibiciones, pero no defienden terrenos propios ni harenes (Leks dispersos).
LAS RUEDAS DE LAS AVUTARDAS
El celo de las avutardas consiste en una exhibición única entre las aves ibéricas. Este comportamiento se da entre finales de marzo y finales de abril y consiste en una competición entre los machos por exhibirse entre ellos o ante las hembras.
A continuación os muestro paso a paso dos de estas ruedas, ambas con macho y hembra.
Prioridad Av, Raw, compensación de blancos en nublado, ISO 100, velocidad 1/250, F: 10, -1/3 de compensación, medición de la luz puntual ponderada, a 350 de zoom.
Todas las fotos que se muestran a continuación de esta primera rueda, se sacaron con los mismos parámetros. Todas las imágenes se corresponden con un episodio continuo que duró aproximadamante 7 minutos y se produjo en un espacio de no más de 15 metros en los cuales ambos sexos se desplazaron desde la primera a la última foto.
PRIMERA RUEDA 8:45 a.m.- 8:52 a.m.
Todas estas fotos están sacadas a unos 10-12 metros, son formato completo o con ligerísimos recortes de no más del 10 %. a unos 350 mm con el 100-400 de canon.
FASE I:
Un macho pasea con la cola en abanico y las barbas oblicuas haca abajo. Esta es la forma habitual de desplazarse en la época de celo.
FASE II:
Aparece una hembra, mucho más pequeña que el macho. No siempre es fácil verlas, a pesar de su tamaño considerable, éstas son bastante crípticas, desdibujándose con el entorno.
FASE III:El macho en cuanto detecta a la hembra, comienza a hinchar el buche y empieza descolgar las alas.
FASE IV:
Las barbas toman casi una posición vertical en la cabeza, las alas se descuelgan pocoa apoco y se empiezan a girar para mostrar las partes ventrales blancas de las mismas. El macho levanta la cola y se vuelve hacia la zona de la cabeza.
FASE V:Las barbas están completamente verticales, las alas descolgadas, la cola vuelta mostrando todo el blanco de las partes ventrales. El buche muy hinchado.
FASE VI:Las alas se comienzan a girar en su totalidad para mostrar el blanco de su anverso. La cabeza y el buche comienzan a bajar hacia el suelo.
FASE VII:La avutarda macho es como una gran bola de nieve. Las alas y la cola están vueltas hacia atrás mostrando todo el blanco de la parte inferior de su plumas, el pico desaparece entre las barbas y el buche está completamente hinchado.
FASE VIII:El macho baja el buche hasta tocar literalmente el suelo con él. Comienza a agitar las plumas de las alas y la cola, al igual que el buche. Esta es la posición final de la fase de rueda.
La hembra que ha estado todo el tiempo a unos 10 metros se acerca a observar al macho, éste manteniendo la postura de celo se ha ido desplazando poco a poco hacia la hembra.
El macho empieza a girar sobre si mismo exhibiéndose ante la hembra, de forma que esta pueda ver todo su cuerpo como una gran bola blanca.
La hembra pasa sin mostrar aparente interés por el macho que se esfuerza al máximo agitando las plumas de su cuello, alas y cola.
La hembra se para, observa al macho con más interés mientras éste no para de dar giros lentos sobre si mismo y sigue agitando las plumas y manteniendo la postura de rueda.
La hembra no parece estar interesada en este macho y se aleja, mientras el galán realiza un último esfuerzo por atraerla.
La época en la que están realizadas estas fotos, 1 de abril, es perfecta para las ruedas de las avutardas pero un poco temprana para copulas, por lo que las hembras todavía no están demasiado interesadas en los machos aunque si hay citas de cópula tempranas en estas latitudes (como diré en la segunda rueda).
El macho deja poco a poco la postura de rueda, recoge, alas y cola, deshicha un poco el buche y baja algo las barbas y se levanta ufano en busca de otra hembra o para mostrarse ante otros machos en el Lek.
Esta foto corresponde al mismo macho un minuto después. Se me llegó a acercar al hide a menos de 5 metros y me rodeó. Está sacada con el 100-400 a 100 mm y me costaba encuadrarle. Se fue desplazando poco a poco, siempre altivo, en busca de otros cinco machos que estaban a unos 15 metros.
SEGUNDA RUEDA 8:45 a.m.- 8:52 a.m.
Todas las fotos de las segunda rueda está sacadas entre las 9:45 y las 9:49. En una zona de cardos que no parece afectar lo más mínimo a todo el ritual y a unos 18-20 metros de distancia, con el máximo zoom del 100-400. Las fotos están recortadas un 10% o en formato original.
Prioridad Av, Raw, compensación de blancos en nublado, ISO 100, velocidad 1/320, F: 12, -1/3 de compensación, medición de la luz puntual ponderada, a 400 de zoom.
Un macho comienza a desplegar una rueda a unos 18 metros de distancia, la primera vez que lo veo está de espaldas medio mirando a donde yo me encuentro en una postura algo diferente de la habitual, con las alas más desplegadas y la cabeza muy tiesa.
Casi sin saber de donde aparece a su derecha una hembra, muy pegada a él e inmediatamente comienza una rueda. El amor entre los cardos.....
El macho gira sobre sí mismo y la hembra siempre muy cerca gira en sentido contrario a él.
En un momento determinado ambos empiezan a girar casi al unísono, manteniéndose muy cerca uno del otro.
Esta rueda se prolongó por unos 3 minutos, hasta que la hembra comienza a mirar muy detenidamente a la derecha del macho.
El macho reduce algo la postura de celo y comienza a mirar donde dirige la atención su compañera.
La hembra mira al macho, que ahora fija su atención hacia su derecha.
Ambos protagonistas miran en la dirección y yo cojo los prismáticos a ver si hay algo que atraiga la atención de los dos espécimenes. Y efectivamente es un perro mastín de los que cuidan las ovejas que me acompañaron durante todo el día que estaba a unos 40 metros de las avutardas.
El mastín se tumba en el suelo y las avutardas pierden el interés en él. En esta foto, como en todas las anteriores aparece un tercer protagonista a lo lejos, no a más de 15 metros de las avutardas, es un macho de sisón que seguía a tres hembras de su especie. En la foto se desdibuja a la izquierda de las avutardas.
Esta pareja se alejó unos 20 metros más, es decir a unos 35-40 metros y copularon. Aunque tengo fotos de ese momento, la calidad de las mismas es más bien deficiente, por la distancia y porque estaban medio tapados por la vegetación.
Hide desde donde se realizaron las fotos (foto de Manuel Calderón)
Estuve con avutardas dentro del hide desde primera hora de la mañana hasta casi las 20:30 de la tarde, en un día realmente especial.