El certificado energético y el equipo de climatización

Los equipos de climatización por defecto o estimados ante el certificado energético con la aplicación CE3X.

Pretendemos reflejar la importancia de introducir los rendimientos en los equipos de climatización en el certificado energético de una vivienda y las consecuencias de estimarlo por defecto, para ello comparamos dos casos con el programa CE3X, en el primero se obtiene la calificación con el rendimiento por defecto y en el segundo se estima el rendimiento estacional a partir del rendimiento nominal obtenido de la lectura de la placa de características del equipo y de su antigüedad.

Por defecto en equipo de climatización ante la aplicación  CE3X  (Caso Práctico -1)

Se presenta sobre una  vivienda en bloque construida con anterioridad a la Norma NBE CT-79,  situada en Valencia. La vivienda dispone de un calentador de gas natural, así como de un equipo de climatización bomba de calor con split de pared situado en el salón comedor y por tanto cubriendo una demanda que corresponde a una superficie de 21.96 m2,  de más de diez años de antigüedad, en este primer caso se estima el Rendimiento Estacional a partir del rendimiento nominal  "por defecto" y de la antigüedad del equipo.

La calificación  energética para este caso es una "G":

Ahora adoptamos el rendimiento obtenido  en el  equipo de climatización según características del fabricante. Programa CE3X  (Caso Práctico -2)

El rendimiento estacional se estima según instalación, aplicando el rendimiento nominal real, obtenido a partir de las características técnicas indicadas en la placa del mismo, dividiendo la potencia térmica generada por el split entre el consumo eléctrico, para cada servicio (se obtiene un COP de 276 % en calefacción y un EER del 254 % en refrigeración).

La calificación energética  para este caso es una "E":

Conclusiones ante la  calificación energética obtenida:

Nos encontramos que al haber variado únicamente el rendimiento del equipo de climatización en el certificado energético las demandas de calefacción y refrigeración se mantienen, ya que la envolvente térmica de la vivienda es la misma en ambos casos.
Evidentemente en el segundo caso al introducir un equimo con mayor rendimiento se reducen los consumos de energía y las emisiones en calefacción y refrigeración, por lo que la calificación energética de la vivienda ha mejorado.
Al introducir el rendimiento del equipo por defecto -primer caso-  el programa nos penaliza obteniendo la peor calificación posible. Debemos tener en cuenta que en la eficiencia energética de una vivienda influye no sólo la envolvente térmica sino el rendimiento de nuestros equipos de ACS y climatización.