El Cuervo

Publicado el 15 junio 2011 por Viktor @ViktorValles

Fue siempre Wendy una niña risueña. Los ancianos la recordaban como una pequeñaja que pasaba los veranos jugando en el parque situado en frente de casa de su abuela, a veces con otras niñas de su edad o a veces con el cachorro que tenía apadrinado.
El brillo y la felicidad se derrochaban a través de su sonrisa y la dulce voz siempre tarareaba dulces melodías. Wendy siempre fue admirada por los adultos, quienes creían que por ella el tiempo no pasaría.

Pero lo que nadie iba a imaginar es que el segundero jamás para y arrasa con el tiempo a su paso…

Cumplió Wendy las trece primaveras. Se asomó por la mañana a través de la ventana y avistó a un extraño pájaro negro posado en el árbol crecido al lado de su casa. Él la observaba y ella empezó a notar algo extraño en sus entrañas…

El cuervo batió sus alas y emprendió vuelo, terminando posándose entre las manos de Wendy al mismo tiempo que llegó su primera sangre. Ella cerró los ojos y algo empezó a cambiar en su rostro.

En su mente los grilletes apretaban sus muñecas mientras una fina aguja cosía sus labios, las frías cadenas la esclavizaban mientras su débil cuerpo, inmóvil, no podía hacer nada. La opresión iba a ser su eterna condena…
Wendy se hizo mujer y descubrió lo que ello conllevaba. La felicidad que se reflejaba en sus ojos fue disipando lentamente hasta tornarse gris, dejando escapar una lágrima que viajó a través de las mejillas…

Para todala Eternidad.

Víktor Valles
Entrada No Para Cualquiera (Facebook Page)

Imagen: Celeste Palacios
http://www.celestepalacios.com