Nadie sabe a ciencia cierta por qué los bostezos son tan contagiosos. O al menos, de todo lo que yo he podido leer e investigar, no he obtenido ninguna explicación definitiva. Lo que sí está claro es que se contagia, y eso está más que probado por cada uno de los seres humanos que habitan este planeta.
Ahora bien, hay veces que ver a alguien bostezar sólo contagia a unos pocos, mientras que otros ni se inmutan. ¿A qué se debe esto?
Y digo más, ya no sólo ver bostezar a alguien, sino que muchas veces el bostezo se transmite oyendo a alguien hacerlo, o simplemente leyendo acerca de ello. Yo mismo he bostezado un par de veces escribiendo esto. ¿Qué complejo sistema fisiológico es capaz de regir este fenómeno? ¿Cómo es posible que algo tan habitual sea tan difícil de explicar? Demasiadas preguntas para tan pocas respuestas.
Si alguien sabe del tema o tiene teorías interesantes sobre ello, que no se corte en absoluto, y las comparta con nosotros. A ver si entre todos podemos llegar a una conclusión de andar por casa, que satisfaga nuestra curiosidad.
Os dejo con la tierna imagen de un bebé que contagia el bostezo a todo hijo de vecino; yo cada vez que la miro abro la boca… ¿A que os sucede lo mismo a vosotros? Apuesto a que nueve de cada diez lectores ya están bostezando…