Tu que eres la Esperanza de un mundo que se estremece ante todo lo que contempla, Tú que alimentas nuestra ilusión y nuestra confianza puestas en Ti, Tú que eres la verdadera y única meta de nuestro amor, Tú regalo bendito de Dios a Sevilla, Tu lo eres todo para nosotros, Tú y sólo Tú, y por eso esta Ciudad, por encima de todos los calificativos que quieran asignarle es la Ciudad de la Esperanza. Esa Ciudad, que Tú lo sabes bien, en el delirio de amores con que te quiere, antes de que entres de nuevo en tu Basílica y deje de tenerte en sus calles, busca cada año un ángel macareno que desde la bóveda de los cielos te cante la saeta que, rebasando el espacio de tu bendita tierra, llegue a los confines del mundo entero para que sepan por qué esta Ciudad es Ciudad de la Esperanza porque:
Sevilla vio su Esperanza, entu carita morena, y te hizosu Madre buena, el centrode su bonanza, y te llamóMacarena.
Muchas gracias.
Fernando Mª Cano-Romero Méndez