Una semana me tomó leer esta novela, y es probable que la hubiera terminado antes, pero he tenido unos días complicados.
Ríos Ferrer ha plasmado en su novela un argumento que pudiera parecer insólito. Como el título del libro indica, es exactamente de lo que se trata. ¿Sabían ustedes que en el 324 d.C., se llevó a cabo en el senado romano un Juicio de Dios? Los documentos correspondientes a dicho evento fueron guardados y preservados con mucho cuidado y en absoluto secreto por la Iglesia. Y es la clave que contiene los antecedentes para un nuevo juicio a Dios, o en este caso, a la Iglesia, interpuesto por una persona que culpa a Dios por todos los males que suceden en el Mundo que Él creó.
No voy a adelantarles el final, pero a mí me satisfizo una enormidad. Pude respirar tranquila, y lo digo literalmente. Una novela muy recomendable por su originalidad y por su complicada trama, digna del mejor de los orfebres. Una maquetación excelente, con la numeración de capítulos que llevan al sitio que uno busca, y al final la lista de personajes, porque son varios. En medio de una trama de tanta acción, agradecí especialmente la primera conversación entre el cardenal Noldo y el encargado de la Biblioteca del Vaticano, Roncelli, para mi gusto un ejemplo de cómo hacer un diálogo en el que se destila humor sin que el narrador intervenga demasiado.
El juicio de Dios está a la venta en AmazonSi desean contactar al autor en Twitter: @eriosferrer http://secuenciaypalabra.blogspot.com/
B.Miosi