Los conejos de su chistera le encontraron trabajo en un parque y ahora saca de una mágica bolsa migas de pan que, entre aplausos, las palomas hacen desaparecer.
Revista Talentos
Un temblor de manos desnudó los ases que guardaba en su manga y, abatido, abandonó los trucos en el desván del olvido.
Los conejos de su chistera le encontraron trabajo en un parque y ahora saca de una mágica bolsa migas de pan que, entre aplausos, las palomas hacen desaparecer.
Los conejos de su chistera le encontraron trabajo en un parque y ahora saca de una mágica bolsa migas de pan que, entre aplausos, las palomas hacen desaparecer.