Rob ha sobrevivido a un tsunami y ahora vive en un tejado, caza tesoros en su barco hecho de corcho blanco y está perdidamente enamorado de Lana.
En una de sus excursiones en busca de nuevos tesoros marinos, encuentra una piedra mágica que le permite transformarse en cualquier persona que desee.
Este descubrimiento pone su vida bocarriba, pero también le ayuda a descubrir que en el mundo nada es lo que parece.Hace tres meses tuve la oportunidad de asistir a la rueda de prensa de los Premios SM, en la que se revelaron los nombres de los ganadores de las ediciones de este año de los Premios Gran Angular y Barco de Vapor. A los asistentes nos regalaron un ejemplar de ambas novelas, y después de oír lo que decían de ellas el editor de SM y los propios autores, me moría de ganas por leerlas, especialmente El mar.
Y sé que quizá sea culpa mía por haberme formado expectativas (algo que normalmente trato de evitar a toda costa en mis lecturas), tal vez por el hecho de que se trate de un Premio Gran Angular, pero el caso es que al principio la novela me decepcionó un poco. Por suerte, luego la cosa fue cambiando y al final me dejó un sabor de boca bastante bueno.
Cambiando de tercio, la voz narrativa me ha parecido sin duda alguna lo mejor de la novela. Rob, el protagonista de la historia, es de los personajes más humanos y realistas que he tenido el placer de leer, y Patricia García-Rojo logra captar su voz a la perfección, de modo que hasta cuesta creer que no sea el auténtico Rob quien está narrando la historia realmente. Su caracterización me ha parecido simplemente brillante, y es uno de esos protagonistas que logran adentrarse en tu corazón para llegar a emocionarte.
Los personajes en general, aparte del propio protagonista, están bastante bien logrados. La autora parte en ocasiones de clichés para crearlos, pero logra dar vida propia a cada uno de ellos, además de una personalidad muy bien definida y una manera de comportarse y de hablar bastante marcada que dota de un gran realismo a la historia.
Otro aspecto que me ha gustado mucho del libro es el mensaje que transmite. No quiero ahondar demasiado en él, pero sí que diré que Patricia logra mostrar su mensaje de forma clara pero sin llegar a ser obvia y pecar de aleccionadora, un logro del que realmente pocos autores son capaces. Y, desde luego, es un mensaje precioso y muy necesario.
En definitiva, El mar es una novela que me ha gustado mucho a pesar de los problemillas que tuve al principio con ella, pero lo cierto es que recomiendo leerla sin demasiadas expectativas ni esperar demasiado para dejar que os sorprenda. Desde luego, yo me he quedado con muchas ganas de leer futuras publicaciones de la autora, porque estoy seguro de que tiene mucho que ofrecer.
Lo mejor: La voz narrativa.Lo peor: La historia me ha parecido algo floja.Te gustará si... quieres leer una historia tierna y sencilla.