El museo de las almas literarias (John Connolly).

Publicado el 07 enero 2025 por Elcopoylarueca

EL MUSEO DE LAS ALMAS LITERARIAS

«… llevaba una vida de imaginación alimentada por historias».

El museo de las almas literarias es una novela corta y entretenida. Es un relato que oculta interesantes interrogantes tras una trama detectivesca. A un pueblito inglés, donde hay una biblioteca muy particular, llega un bibliófilo que busca paz para poder dedicar su tiempo a leer y a escribir. Berger, quien ha heredado lo suficiente como para renunciar a su plaza de funcionario, luego de una serie de vivencias que lo inquietan y que no tienen lógica explicación, decide convertirse en detective privado.

¿Tiene el lector la capacidad de convertir la ficción en realidad? ¿Tiene el poder de dar sosiego a los personajes cuyas historias lo conmueven hasta el punto de que habitan en su subconsciente? Si es que sí, entonces el lector puede modificar el destino de los seres literarios.

Anna Karenina, película dirigida por Márton Garas, 1918.

¿Y puede el autor cambiar los desenlaces de sus textos originales sin que haya consecuencias irreversibles para sus protagonistas?

¿Qué pasaría, por ejemplo, con Hamlet, con Holmes y Watson, con Gatsby, con Scrooge, con Macbeth, con Don Quijote, con Drácula, con Anna Karenina… si sus destinos iniciales son replanteados? ¿Qué pasaría si se altera la carga dramática que les ha permitido atravesar la barrera del tiempo? Es «esa» carga dramática, y no otra, la razón por la que son poderosos, por la que forman parte de la memoria colectiva —los personajes y sus semblanzas son referencias habituales, incluso, para quienes los conocen de oídas. 

En la biblioteca de El museo de las almas literarias habitan, físicamente y en compañía de sus primeras ediciones, personajes inmortales que llevarán al lector a cuestionarse dos asuntos relevantes: el primero es si es posible alterar el destino.

El segundo tema es si los protagonistas de la literatura universal son seres «únicos», con identidad propia, con un «Yo» —no olvidemos que la ficción es hija del hombre—. Como Berger, el bibliófilo, pretende desnaturalizar la historia, creo que es importante señalar que el autor desliza por su novela veladas críticas a la sociedad que… ¿construimos? 

El museo de las almas literarias se encuentra en la colección Bibliomisterios, de la editorial RBA. 

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