I
Apresura el paso
en el círculo infinitode las dunas deshabitadas...
La mano por visera, elije...: El desierto húmedo o seco...?
El mar, a cuál lado de la mano? ...
El hacha es sólo una metáfora del viento antes de clavarse en el árbol...
II... porque estarás donde esté tu mente...:
a la vuelta del sueño,entre la espuma que respira algún saurio florecido...
Estrujas de seguro tu piel en el esmalte de algún fetiche que confundes con alguna escultura de minutos que se avientan como ceniza,en alguna noche que te inventas para mal vivir algún pasadoaún por darse,o entre la pérfida maraña de alguna selva habitada por bestias de algodones como aquellos de azúcar en los circos de antaño...
No creo que algún Caballero de los que tampoco ya hay en estos díaste rescate de esos palacios como torres de mermelada amarga...
y así, la arena de tus relojes de cristal rotoes lamida por el viento y untada a remotos muros...
... o quizás habites alguno de esos megalitoshermosos pero incapaces de explicarse en sí mismos...
Nada mejor que la piedra para atesorar silencios mudos...IIISería un hipócrita
si absuelvo la inocencia,si de tanto inocenteno llegue a ser bandido...