Acá algunas fotos de los felices miembros del Reino Original de la revolución de la cuchara y apartes de la ponencia presentada en el congreso de juventud de la ciudad de Bogotá.
La política es apasionante.
Quizás para algunos suene raro viniendo de alguien que no milita en ningún partido. Ni se obsesiona con el tema electoral ni nada de eso. Pero así es, la política es apasionante… si quizás algunos no se interesen por lo que pasa, esto más bien se debe a esa forma externa en que llegamos a ella en estos pueblos. Pero a quién no le va a interesar un tema tan ligado con su quehacer diario, fronteras, papeles, sueldos, policía, compras… servicio militar… son palabras que me pasan por la cabeza de forma descuidada pero sé que son mucho más. Vivimos juntos: Hay temas difíciles de evadir. Ahora, como todos ustedes saben, la “especies” políticos, periodistas, analistas que pueden surgir alrededor de este fenómeno no siempre son lo mejor. Espero con esto no ofender a nadie.
Entre ellos, los analistas… uno no se explica cómo pueden sobrevivir, cuando ellos mismos después de libros y libros han reconocido que tratándose de una ciencia “humanística” nada se puede prever, algo como: “reconozcamos que no sabemos nada, y especulemos un poco”, se sabe que tratar con personas no es lo mismo que medir un puente pues. Ahora, cómo hace para prosperar un oficio que tan conocidamente inútil?
La única explicación posible que es muy apasionante y no podemos dejar de pensar en ella. La política y sus fenómenos, así nos dé en la cabeza una y otra vez, nos involucra.
Y así… los analistas, politólogos y todas esa gente sabe que lo máximo que se puede hacer es unir algunos hechos ya pasados para no repetir los mismos errores. Saber qué se nos viene… Es difícil, tan difícil, como le oí comparar alguna vez a alguien, tan difícil como saber si la esposa o el esposo nos va a “salir bueno”. Piensen en ustedes mismos si son separados o en alguien que lo sea y me entenderán.
Ahora bien, contra el desempleo, la violencia intrafamiliar, las relaciones internacionales, la deuda externa, los problemas de orden público, proponemos cambiar la dieta. Ja. Suena extraño, no? Qué tiene que ver?. Sorprendidos? Y acaso la historia no está hecha de sorpresas? Dijimos arriba que nada se puede saber. “Pueden preverlo todo, pero no pueden prever la astucia” decía el famoso ladrón de Niza.
Alguien dirá: pero ustedes están cayendo también en prever al decir que la cuchara lo solucionará… y eso no se sabe. Tiene razón el único detalle es que: Ya se supo. Simplemente vinimos a dar la noticia. Informes y recontrainformes nos lo han puesto en claro: comer carne es, entre las cosas que cada uno de nosotros puede hacer, la forma más viable en que de verdad se puede hacer que algo pase. Ya pasó los que no se han dado cuenta, deberán leer más historia en algunos años.