Los periódicos mudaron el final del cuento: hubo un disparo y su cadáver amaneció en el río.
Circe lo convirtió en sapo y sus pocos amigos lo llamaban así. Una noche de plenilunio vino la princesa a deshacer el hechizo y le dio un beso de fuego en la mejilla.
Los periódicos mudaron el final del cuento: hubo un disparo y su cadáver amaneció en el río.
Los periódicos mudaron el final del cuento: hubo un disparo y su cadáver amaneció en el río.