Quiere que su colección de automóviles traspase el túnel del tiempo, que recorran las praderas, las interminables autopistas, que sus motores suenen a limpieza y mecánica. Quiere que Ben Young alcance todos sus sueños, que sea un hombre en toda su plenitud. Quiere que le sigan amando como hasta ahora, sin olvidar los amores del pasado que siguen estando muy presentes en su interior. Quiere que la música que escuchamos suene a verdad, que la tecnología no camufle las válvulas de los amplificadores, que los megas no devoren el latido real del bombo. Quiere volver a tocar con la Crazy Horse y en aquel festival que conserva con sabor amargo en la memoria. Quiere seguir componiendo sublimes canciones, no especular con su guitarra. Quiere seguir siendo él mismo, Neil Young.Tras el apabullante y desnudaCommando de Johnny Ramone, Malpaso Ediciones nos vuelve a ofrecer otra autobiografía memorable y absolutamente recomendable, en esta ocasión de Neil Young. Pieza clave para entender el rock de los últimos cincuenta años, estrella indiscutible en el sentido más esencial, creador de algunas de las más hermosas canciones que se han compuesto. Neil Young es el músico de otro tiempo que ha sabido adaptarse a todos los otros tiempos por los que ha transitado, ya sea en solitario o acompañado:Buffalo Springfield, Crazy Horse, Crosby, Stills and Nash, o, no hace tanto, junto a Pearl Jam. Eterno, no es un adjetivo exagerado.El propio Young reconoce que comenzó a escribir El sueño de un hippie como terapia, ante la necesidad de estar alejado de los escenarios tras la fractura de un dedo... sigue leyendo en La Tormenta En Un Vaso