El tamaño no lo es todo: las 10 mejores novelas cortas que debes leer
Por Julieta Sanguino febrero 12, 2016@julaiilama-+3420SHARES Twitter484484 facebook28942894 pinterest1414 google plus12Share12 linked in00 email00 stumbleupon1Share1 meneame0Share0 tumblr3Share33420SHARES48428941412Share001Share0Share3ShareExisten historias de ficción que por algunas horas nos trasladan a un lugar que nunca imaginamos. Las mismas que sin ningún impedimento nos atrapan inmediatamente y hasta terminarlas, no dejamos de sentir la emoción de estar plenamente inmiscuidos en el relato.
En el libro clásico de José Emilio Pacheco, “Batallas en el desierto“, Carlos, un pequeño niño, se enamora de la mamá de uno de sus amigos. Sueña, vive y anhela estar con Mariana, aunque más tarde se dé cuenta que ella sólo lo mira como un niño ingenuo. O qué decir de “El Principito” que nos cuenta la historia de un piloto que sin más remedio debe caminar por el desierto y de pronto encuentra a un pequeño niño que vaga solo después de llegar por un asteroide.
Estas historias nos hacen sentir en otro mundo, pero sobre todo son un gran remedio para aquellos a los que les da miedo tomar un gran libro porque están seguros de que tardarán semanas en acabarlo. Una novela corta tiene las palabras exactas para emocionarnos en breves instantes y con gran maestría, los autores hacen que todo desaparezca mientras leemos su historia. Te presentamos algunas que lo han dominado con maestría.
“La metamorfosis”, Franz Kafka
En la primera línea, esta novela nos ha atrapado y conquistado. Cómo olvidar la premisa que lo empieza todo: “Cuando Gregorio Samsa se despertó una mañana después de un sueño intranquilo, se encontró sobre su cama convertido en un monstruoso insecto”. Esas simples líneas nos hacen adictos a la novela y sin poder soltarla, debemos acabarla.
“El coronel no tiene quien le escriba”, Gabriel García Márquez
Escrita por Gabriel García Márquez en París, esta novela fue rechazada por varios editores antes de que se publicara. Con un dominio de la economía de la escritura, Márquez logra brindarnos una novela pura y transparente sobre la injusticia y la violencia. Después de años de servicio, un coronel reclama a la patria todo lo que le debe, pero parece no haber respuesta.
“Noches blancas”, Fiódor Dostoyevski
Narrada en primera persona por alguien a quien nunca le conocemos el nombre, esta novela nos cuenta la vida de un joven soñador y solitario que imagina cómo será su vejez llena de soledad. Por cuatro noches y una mañana, nos damos cuenta del gran cambio del joven, que de la desolación, logra encontrar a la mujer ideal, Nástienka, quien lo hechiza absolutamente.
“Bartleby, el escribiente”, Herman Melville
“Rebelión en la granja”, George Orwell
“El despertar”, Kate Chopin
“Fahrenheit 451“, Ray Bradbury
“Nocturno en Chile”, Roberto Bolaño
La séptima novela del escritor chileno Roberto Bolaño. Sobre esta obra aseguró: “es la metáfora de un país infernal, entre otras cosas. También es la metáfora de un país joven, de un país que no sabe muy bien si es un país o un paisaje”. Con las ganas de mostrar la falta de culpa de un sacerdote católico, nos muestra que todos somos malos, brutos y víctimas de la realidad.
“El amante”, Marguerite Duras
Con este libro, la carrera de Marguerite Duras se convirtió en una autora que todos querían leer. Una narración autobiográfica en la que expresa con gran deseo, la historia de amor entre una adolescente de 15 años y un millonario comerciante chino de 26. Un amor intenso que emana odio y que la hizo madurar. Cualquiera que lo lea, quedará rendido ante las palabras de Duras.
“Habla”, Laurie Halse Anderson