Duele tanto a quien la dice como a quien la escucha.Qué palabra tan fea...Aunque a veces es necesario pronunciarla para avanzar y crecer en tu camino y soltar todo el lastre que te arrastra al abismo. Si... es difícil, lo se, pero es mejor un adiós para siempre que un hasta luego doloroso.
A veces decimos adiós tan solo con las manos, porque con la boca pedimos un hasta luego, con los ojos un quédate y con el corazón un te quiero....
Es una palabra que tiene tantos significados como tonos.Y no duele tanto ese adiós como los recuerdos que te dejan marcados de por vida. Pero sobre todo recuerda, que detrás de ese adiós, viene un precioso "Hola".Así que no te aferres, dí adiós de vez en cuando y renova tus energías, tus alegrías, tus cargas, tus propósitos... porque tal vez ese adiós te cambie la vida a mejor. Que ya lo dice el amigo Sabina" Que este adiós no maquilla un hasta luego, este nunca no esconde un ojalá, esta ceniza no juega con fuego, este ciego no mira para atrás..." Hoy no ando muy inspirada, pues tuve que pronunciar un adiós... pero eso lo dejaremos para otro día.
ESTE POST ES TAN SOLO UN HASTA LUEGO, UN HASTA DESPUÉS DEL VERANO.
Que lo disfrutéis todo lo que podaís y no desaprovechéis ni un solo instante.
Seguiré por las redes, que nos vemos en Septiembre. ¡Y que no os falten los besos sonoros y abrazos rompecostillas !