Revista Diario
Ellas.
Publicado el 12 noviembre 2016 por RizosaEllas y yo somos muy diferentes. Ellas son inteligentes, cultas, divertidas, saben de música y de teatro y de historia, escriben de maravilla y disfrutan de las pequeñas cosas de la vida. Cada día me enseñan algo nuevo y me regalan un pedacito de su mundo cotidiano, a mí, que soy una rancia despegada que nunca llama ni escribe guasaps porque vivo en Bealand. Ellas no me reprochan, no me juzgan aunque no estén de acuerdo conmigo, no me regañan, (bueno, a veces sí, pero porque la lío mucho y me lo merezco) me escuchan con un cariño y una paciencia infinita y se ríen con mis chorradas. Ellas han aparecido de la nada y han decidido que, para mi fortuna, yo soy una persona que quieren tener cerca, aunque sea desde la distancia física. Ellas me han elegido y ven algo más en mí. Me hacen sentir dichosa y me sorprenden cuando estoy choff.
Ellas se han cargado de un plumazo mi frase estrella de la juventud, -yo es que soy más de amigos que de amigas- y me han demostrado que la verdadera amistad entre mujeres es fuerte, sana y mola millones.
Ellas me hacen la vida más bonita con un simple tuit, con un me gusta, con un comentario o con un "espera, llego a casa y te llamo". Ellas llenan mi instagram de rostros hermosos, sonrisas infinitas, cosas cuquis, ginkos, gatos y perros adorables, rizos pelirrojos, libros de los que no tenía ni idea y zapatos glamourosos. También llenan mi memoria de -cada vez más- recuerdos de aventuras fantásticas, reuniones furtivas de verano y carcajadas con lagrimilla.
Ellas han vivido conmigo etapas muy importantes de mi lucha, y las he sentido cerca. Han crecido conmigo, aunque envejezcan muchísimo mejor que yo. Tengo la extraña sensación de que ya forman parte de mi vida, de mí misma, y el sentir que están ahí aunque no hablemos todos los días me llena de tranquilidad y de paz. Me aportan, casi sin querer, una serenidad que me hace mucha falta.
Este fin de semana es muy importante y especial para dos de ellas. Hoy se casa Sandra, mi Flés. Ella y su casi esposo me recuerdan cada vez que se me olvida que el amor existe, que es el motor de la vida y que, pese a todo, hay esperanza. No estaré ahí para darte un abrazo luego, pero que sepas que te lo estoy dando muy fuerte con el corasóns :P
Mañana será el cumpleaños de Berta, mi pelirroja peligrosa, y yo espero que lo celebre por todo lo alto, que se lo pase genial y que reciba todo el cariño que se merece.
Hoy quiero que sepáis que os quiero mucho, que me he despertado pensando en vosotras y que os deseo de corazón que seáis todo lo feliz que se pueda sin implosionar ni haceros pis de la emoción. Bueno, Sandra puede hacerse pis porque con el vestido de novia igual ni se nota :P
Brindo por vosotras. Brindemos todos :) Aunque bueno, con biofrutas, que no son horas.