El concepto de la vida (como viaje, como estancia, como cambio) siempre ha sido un tema predilecto por escritores (y en consecuencia) por cineastas. Y si alguien puede dar lecciones sobre historias cruzadas es Robert Altman y sus catedralicias crónicas de encuentros casuales y causales.
Si se mezclan esos dos conceptos, esas dos maneras de contar relatos, el resultado es 'El atlas de las nubes': una película de historias cruzadas cuyo resultado es la influencia en vidas pasadas, presentes y futuras. El que suscribe considera un error asumir que el trío Wachowski-Tykwer ha querido hablar del sentido de la vida, del karma, de experiencias pasadas y futuras o de resurrección. Lo que han querido mostrar es una historia simple pero contada de seis modos distintos, una especie de 'Rashomon' existencial sobre las consecuencias de nuestras decisiones. Es una lástima que la concepción general en torno a esta película se haya quedado en un quiero y no puedo o incluso en una obra tan compleja que cualquiera no puede entenderla. Nada más lejos de la realidad. Basta coger cualquiera de los relatos que conforman este atlas para darse cuenta que, individualmente, no tienen mucho sentido o carecen de un interés capaz de superar al conjunto. Al unirse crean una red indisoluble por la cual cada historia es complementaria a la anterior, ya sea por las decisiones o creencias de sus personajes o porque la época en la que están contadas está legítimamente escogida.Por ello, no hay que creer que 'El atlas de las nubes' nos esté hablando más de la cuenta. Esto no es 'El árbol de la vida' de Malick. No va más allá de cualquier ejemplo de Robert Altman ('Vidas cruzadas', 'Gosford Park') o el 'Traffic' de Soderbergh. Puede llegar a despistar que los mismos actores interpreten diferentes personajes en relatos distintos, y que todos estén unidos mediante un macguffin extraño de una marca de nacimiento. Todo puede llevar a una conclusión errónea y decepcionante en la cual esto no es más que la historia más sencilla jamás contada. Lamentablemente, esta red indisoluble da lugar a que la unión de historias produzca preguntas que no tienen respuesta, porque Tom Tykwer, Lana y Andy Wachowski han querido dar preferencia a unas cuestiones más directas. Y aunque el montaje del film sea envidiable, siempre quedará la sensación de que los directores se han quedado con las ganas de contar más. 'El atlas de las nubes' es una película arriesgada, y como todo riesgo, acaba cayendo en un abismo del que cualquiera no puede recuperarla. Si la comprensión se limita a estas historias unidas por un simple nexo será un entretenimiento con trasfondo filosófico; pero si alguien quiere creer que el sentido de la vida estaba implícito en sus fotogramas, se llevará la mayor decepción de su vida.La llave azul otorga a "El atlas de las nubes" un 6'5 de nota.