que confundas tus pasos
y llames en la puerta equivocada.
Pasará un tiempo, (debes de tener paciencia),
hasta que recobres la confianza,hasta que puedas mirar a las aves,
a las olas,
al jardín de las rosas,
al bosque de los robles,
al lago encantado
y al humo de las chimeneas,
para hablarles,
para leerles un verso,
para decir y gritar que ahí
está la poesía y la vida.
Pero lo harás,
lo vas a conseguir.todo tiene su tiempo,
su esfuerzo.
Y volverás a sentir la llamada de la sangre
nuevamenteRafael Sánchez Ortega ©
26/11/18