Todo llega y todo pasa, y así ya quedó en el recuerdo e inmortalizado para siempre, este pasado sábado 12 de Mayo, en el que vendí Flores en la Feria del Libro de Sevilla.
Saco también ciertas conclusiones personales de la jornada, que me voy a guardar para mí, de momento. Sólo señalar que hay quien ha perdido una gran oportunidad, y no conmigo precisamente… A destacar como hechos positivos, un reencuentro valioso e inesperado tras quince años de lejanía física, el conocimiento personal de amigos hasta entonces virtuales, y el refrendo de una buena amistad. Me sentí arropada (curiosa metáfora en un día de más de 40º…), protegida y mimada. Con todo eso, y con haber firmado más de lo previsto, me voy a quedar. Gracias, gracias, gracias…
Os dejo las imágenes del día, y la entrevista escrita del pasado 9 de Mayo.