Las casualidades del destino quisieron que una persona que no conocía se convirtiera en mecenas de Catorce años de silencio. Las casualidades del destino hicieron que fuera una consumidora habitual del género de ciencia ficción; y que estuviera vinculada con el diario El Correo fue el colofón que ha derivado en esta estupenda entrevista. Gracias Iraitz U. por tus bonitas palabras, gracias por tu simpatía y por la cercanía. Son las personas como tú las que insuflan energía pura que inyectada en el torrente de forma adecuada, otorgan la determinación a las yemas de mis dedos, los cuales galopan orgullosos sobre las teclas negras cual caballos desbocados y salvajes por la gracia de los aledaños.
Aquí os dejo la entrevista: