ENCUENTROS CERCANOS CON TRES TIPOS
No, no era así, era:
ENCUENTROS CERCANOS AL TERCER TIEMPO No sé, no me suena, mejor algo como:
NOS ENCONTRAMOS EN EL TERCER PISO
Me estoy yendo de tema; a ver, intentemos otra vez:
TE ENCUENTRO CERCA DEL TERCER PITO
¡Epa! No, eso es cualquier cosa. Alguien que me tire alguna pista, que me ayu... ¡¡¡Pará, loco, no, eso no me tires, no!!!!!
...
Horas más tarde, mismo cyber, gente alrededor mío. Me levantan del suelo, me dan una palmada en la espalda y me sientan en la compu. Veo escrito lo siguiente:
ENCUENTROS CERCANOS DEL TERCER TIPO
¡¡Iupi, eso era lo que quería escribir!! ¡Gracia' loco, vo' siempre con la mejor! No se sé que sería de mi sin...
En fin, empecemos...
Antes de leer estas lineas siéntese. No sólo por el shock que va a recibir. Sino porque es largo y estar parado no beneficiará la salud de su columna; piense, la pantalla de la compu está demasiado baja, salvo que usted tenga altura escasa, o haya puesto el monitor a la altura de su vista (algo poco práctico realmente) o bien que haya impreso estas palabr... Ejem, en fin, prosigamos...
Muchas veces la realidad supera a la ficción. Muchas veces la ficción supera a la realidad. Muchas veces la superación ficcioniza al realismo. Muchas veces la realeza fiscaliza a la superstición. Muchas veces uno se enreda con sus propias palabras. Este es el caso, en todas las opciones.
Pasemos a los detalles. Detallemos paso a paso. Pastillemos el retraso (¿¿???). Bueno, no todo en la vida tiene que rimar, pero sí es verdad que en la vida hay que saber remar, y eso rima con rimar, lo que ya es toda una paradoja, que no rimaré con nada si no se me antoja. Pucha, rimé.
El asunto es el siguiente. Encontrábame yo a solas en mi casa de Bahía, aquella que me vió crecer; o bien no que me vió, al ser un inmueble, sino que dispuso de todas las facilidades que mis progenitores adquirieron y le proveyeron en pos de garantizar un desarrollo pleno de mi persona principalmente en los albores de mi juventud. El asunto es que yo me encontraba en ese flor de coso, o casa, preparandome unos soberanos mates, cuando sucedió algo del todo inexplicable, que procederé a explicar (¿?).
En realidad sucedieron dos cosas. Los mates no eran tan soberanos, sino más bien medio vasallos, porque la yerba era una porquería. Pero eso no tiene ninguna importancia. O quizá la tenga, pero les juro que lo que viene ahora es mortal. No mortal de que se van a morir, no es mi intención hacerles daño, quiero decir... Uds. ya saben a que me refiero. (Y ya que saben ¿por qué no me lo explican?)
Termino de preparar los mates (o el mate en singular, ya que no tomé más que uno) cuando escucho una voz de ultratumba que me dice:
-Un mate no se le niega a nadie ¿no, amigo?
-No- respondí automáticamente, y me dí cuenta que la negación implicaba afirmación a la pregunta, lo cual a primera escucha es una increíble contradicción, pero, contrariamente, no lo es, lo cual parece ser la misma cosa, y tampoco lo es, y así podemos seguir hasta pasado mañana. Sin embargo, no reparé en el hecho, y me preocupé más por reparar en el hecho de que de hecho ya no me encontraba solo en mi casa, y eso era un hecho irreparable del cual preocuparse (y ahora que reparo en mis palabras noto el hecho preocupante de que mi vocabulario es de hecho algo acotado y repetitivo; me preocupa que no haya reparación, que sea de hecho un hecho irreparable... ¡como para no preocuparse! Como el hecho que les conté, de hecho).
-¿Quién es ud. y que hace en mi coso, o casa?- dije, concordando con mis conclusiones anteriores que ya han leído, posteriores al hecho, así que tal vez no fue eso lo dije.
-Soy un amigo de la casa, o del coso- me dijo, estableciendo una verdadera hipérbola en el tiempo.
Sorprendido, no supe que contestar, así que prosiguió:
-Vengo de un lugar lejano en el tiempo y espacio, para robar información a los habitantes de este lugar, que luego compartiré a mis colegas y coterráneos a fin de procesarla y usarla en vuestra contra para exterminarlos sin dejar huella alguna. ¿Viste La Guerra de Los MundosPelícula pochoclera basada en la homónima novela de ciencia ficción escrita por Herbert G. Wells, de SpielbergSteven Spielberg, afamado director y productor de cine de Hollywood, de vindicada ascendencia judía y con un mambo bastante extraño e inexplicable con extraterrestres y cosas por el estilo? La misma cosa. Un capo el loco, la tiene clara... Bueno, nada, eso...
Conmocionado, no supe que contestar, así que le pasé el mate, y prosiguió:
-Ah, si, me olvidaba. El chiste está en tomar la forma de alguno de uds., pero sin dejar evidencia. El tema es que tengo que encontrar a algún perejil que no sospeche nada. Pará... Ahora, que lo pienso, puedo matar dos pájaros de un tiro. Porque sabés demasiado, y no me conviene. Yo habitualmente no cuento mis planes ultrasecretos, pero el mate es terrible; entrás en confianza y confesás hasta la invasión interplanetaria más confidencial de todas. Qué bárbaro...
Confundido, no supe que contestar, así que agarré el mate, volví a cebar, se lo dí otra vez, y prosiguió:
-Bueno, muy rico todo- dijo finalmente, dejando traslucir su escaso concimiento en cuestiones yerbales - pero se acabó la fiesta. Vení pa'cá.
Lo último que recuerdo después de ello es haber agarrado mi cámara y sacar una foto apresurada. Es aquella misma que aprecian a continuación en este blog.
CONTINUARÁ...