La Zona Euro está viviendo dias de angustias, terror y pánico, como si se alistara para soportar un inevitable holocausto financiero y en otros lugares del mundo de hecho se vive una fiesta con payasos, champagne y apuestas a raudales por la única y sencilla razón: La supervivencia o muerte del Euro.
El Euro nació de un proyecto político que va en contra el intervencionismo del Estado que intenta tomar el control y manipulación de la economía (comúnmente conocido como Política Socialista). La Unión Europea y el Euro, tiene sus inicios en lo que fue la CECA (Comunidad Económica del Carbón y el Acero, 1954) y la CEE (Comunidad Económica Europea, 1977), cuyo objetivo principal tomado fue la unidad y colaboración europea para evitar competir inhumanamente por los recursos en la forma provocada por las dos grandes guerras que ha soportado el continente. El Euro era el pasaporte hacia la unificación política y económica, pero su creación, sería la causante de una nueva competencia, por no decir, una nueva guerra en Europa de magnitudes inimaginables. Inicialmente se condicionó este pasaporte debía ser usado sólo por algunos países que cumplieran unas estrictas políticas económicas, que gozaran de una economía fuerte, posteriormente permitir el ingreso de los países, que aún, sin tener su economía en buen estado, poco a poco vayan adaptándose a las medidas rigurosas, situación conocida como la Europa de dos velocidades. Esto ocasionó una bomba de tiempo, ya que traía un alto riesgo para los países que tenían estabilidad financiera como Alemania, Francia, Holanda, puesto que la debilidad de las monedas de los países relegados era trasladada hacia el Euro y de éste hacia las monedas de los países fuertes económicamente.
Hoy después de haber pasado muchas dificultades, el panorama económico en Europa no está siendo igual, está soportando una de las mayores crisis financieras en su casa, que le está llevando talvez al inicio de una nueva política de emergencia, con posible intervencionismo extranjero y con resultados desconocidos. Los primeros síntomas de peligro se vieron a finales de la década pasada, en donde Grecia entró en crisis y ocasionó un desequilibrio continental y mundial con el nacimiento de los rescates financieros. Pero los mercados pasan su factura tarde o temprano y ahora se le están uniendo a esta campaña de rescates Portugal e Irlanda y probablemente le sigan España e Italia.
El primer intento intervencionista extranjero se vio con el primer ministro chino, Wen Jibao, quien recientemente hizo un resumen preliminar de las condiciones que los países de la zona euro y Estados Unidos tendrían que cumplir para que su país, y el resto de los BRIC (Brasil, Rusia, India y China), acudieran al rescate, estableciendo, así, la intersección que faltaba entre el declive del imperio americano y la emergencia de China. Wen Jibao colocó sus demandas a europeos y norteamericanos bajo la rúbrica general de "poner la casa en orden", concretado en cuatro puntos, "llevar a cabo políticas monetarias responsables y efectivas, manejar de forma adecuada los problemas de deuda, garantizar la seguridad y la operación estable de las inversiones en el mercado y mantener la confianza de los inversores en todo el mundo".
Con tanto miedo, los gobernantes Europeos han empezado una carrera desesperada haciendo todos los esfuerzos para salvar la situación. En Italia con la salida del Ministro Berlusconi, y poniendo al frente a un grande y respetado tecnócrata Mario Monti, especialista en Mercado Interior y Competencia y en las instituciones financieras, se ha dotado de un Consejo de Ministros cuajado de economistas y gestores, quienes están poniendo en marcha las reformas que le exigía la Unión Europea para recuperar la economía perdida con el odiado Berlusconi.
En España existen dudas sobre como reactivar la economía y crear empleo con una reducción tan drástica del gasto público. Rajoy ha propuesto responder con dos reformas urgentes: la del mercado laboral y la del sistema financiero. En Alemania, con la ministra Merkel se aprobó recientemente una medida estricta para que Europa permita la "salida voluntaria" del euro de los miembros que no cumplan los criterios de estabilidad, originando la llamada Solución Política.
Francia y Alemania se han comprometido a llegar a un plan convincente antes de la Cumbre Europea del 8 y 9 de diciembre que ayude a resolver la crisis de deuda que está amenazando a la economía mundial. Por el momento esta semana los 17 miembros del Euro grupo volvieron a encontrarse en Bruselas para concretar un pacto fundamental de garantías y negociaciones con el Fondo Monetario Internacional y con el Banco Central Europeo, que sería su última carta que salvaría la vida del Euro, consistente en elevar el Fondo Europeo de Estabilidad Financiera tratando de alcanzar la complicada suma de UN BILLON DE EUROS, de no ser así, entonces el Euro podría enfrentarse realmente a su implosión.
Cabe preguntar ¿Cómo acabaría todo esto?, ¿Se salvará el Euro y llegará a ser más fuerte que otras veces?, se piensa que algunas grandes empresas europeas ya han empezado a elaborar planes por si la moneda acaba colapsando y algunos analistas financieros pronostican que el Euro cerraría este año en 1.19 y terminaría desapareciendo a inicios del 2012, otros aseguran que llegará a ser más fuerte que nunca, una "Superpotencia". Nos toca prepararnos para una época de cambios, talvez cambios del que no estemos acostumbrados, sea lo que venga, ¿Occidente seguirá siendo occidente?