Desde la carretera que lleva de Perpiñán a Prades se puede admirar un pequeño pueblo que se alza orgulloso en medio de las montañas. Parece salído de una película antigua y puesto como por arte de magia en la actualidad
Se llama Eus, un nombre sencillo para un lugar de una belleza sin limites que es arropado con esmero por los Pirineos Orientales y el Canigú: montañas que se pierden en el horizonte dibujando un paisaje que fascina desde el primer momento
Subiendo la cuesta que lleva hasta Eus uno va siendo atrapado por el magnetismo del lugar. Se tiene la impresión de entrar en otra época puesto que el pueblo es conservado tal y como fue construido, incluso los autos se quedan en la entrada.
Eus pertenece al repertorio de los pueblo más lindos de Francia y con toda la razón del mundo. Es una belleza antigua que se desliza en el hoy sin ningún problema.
Cuando se conoce se regresa siempre aunque sea mentalmente, nunca se olvida. Eus queda en ese rinconcito del corazón en el que nada se borra.