¿Cómo he llegado hasta aquí? Ni idea. ¿Casualidad, destino, providencia? ¡A saber! Lo que sí sé es quiénes me han ayudado. Como dice Mari Luz, “nunca llegamos a saber si las desgracias que nos ocurren son para mal o para bien. Solo el tiempo te lo puede decir… A lo mejor un día te levantas y descubres para tu sorpresa que te has convertido en una versión mejorada de ti. Entonces es cuando dirás: ¡bendita depresión!”
Y ahora os dejo un cuento suyo, aunque son muchas sus creaciones y muy diversas, mejor visitad el lugar donde habita. Besos mil como siempre y gracias por acompañarme y compartir mis sonrisas....
Marijose Luque Fernández. Sonrisas de Camaleón