Me sentía como Dorothy saliendo de su casa después del tornado, pero yo no iba saliendo de casa, iba entrando y tampoco hubo tornado, solo que no hubo nada antes.
Para llegar al bosque había que pasar por los troncos y no niego que lo intenté, pero las zapatillas no ayudaban, pensé en quitármelas, pero de tanto pensar, desistí de la idea de cruzar hasta el cerro. Desde esa perspectiva se veía igual de bonito.