Ingredientes:
2 claras de huevo ecológico
100 grs. de azúcar caster
50 grs. de chocolate con leche
Unas gotas de zumo de limón
Un pellizco de sal
Elaboración:
Para los que os preguntéis que es el azúcar caster o caster sugar en inglés, es un azúcar fino que está entre el azúcar normal que conocemos (azúcar de mesa o azúcar blanco) y el azúcar glass. La diferencia son los granos mas finos que los del azúcar blanco pero no llega a ser polvo como en el azúcar glass. También carece de humedad y se disuelve muy bien en las preparaciones de repostería como es el caso del merengue que vamos a elaborar evitando quedar algunos granos en la preparación que podrían estropear por completo nuestro rico merengue.
Este azúcar no se suele utilizar en nuestro país, pero es muy común en la repostería británica. Yo lo he comprado en un supermercado inglés, y si no lo encontráis, podéis utilizar el azúcar glass o incluso el azúcar normal, pero tened en cuenta que habrá que añadirlo al principio y batir lentamente para su completa disolución, así no quedarán los molestos granitos al morder los pequeños fantasmitas de merengue.
Precalentamos el horno a 100º C.
Como vamos a hornear, haremos el merengue francés porque para mi es mejor que los otros para este postre y da un resultado excelente. Comenzamos echando en un bol las claras de huevo junto al pellizco de sal, el zumo de limón y la mitad del azúcar espolvoreada. Con una varilla eléctrica o manual vamos batiendo poco a poco hasta ver que la mezcla comienza a burbujear (esto significa que está entrando aire a la preparación, importante para ayudar a que suba y quede perfecta). En cuanto cambie a color blanco paramos y esparcimos en forma de lluvia la otra mitad del azúcar y seguimos batiendo hasta ver que queda muy firme y estable (si queréis reiros un rato, pedir un voluntario a uno de los peques y colocadle el cuenco al revés bajo su cabeza, si está listo no se caerá... y los niños les hará mucha gracia ver el espectáculo).
Ahora con ayuda de una manga pastelera o una bolsita con un pequeño orificio en una de las esquinas a modo de agujero pequeño para poder manejarnos bien, echaremos el merengue dentro e iremos formando pequeños pegotitos sobre una bandeja de horno forrada con un pliegue de papel sulfurizado o vegetal con una separación entre ellos, así evitaremos que se peguen cuando crezcan durante la cocción. Luego metemos al horno aproximadamente 40-50 min. según si queréis que quede muy crujiente o solo por fuera y por dentro suave y blandito. A esto se le llama secar el merengue y lo único que tendréis que tener precaución es de que no doren sino simplemente se cuezan. O habéis visto algún fantasmita de color marrón?? jejeje morenito!
Cuando estén listos los fantasmitas de merengue retiramos del horno y dejamos templar, mientras calentamos en un cazo al baño María el chocolate. Para hacer los ojitos y las bocas a los pequeños he usado la punta de un palillo de monda diente, simplemente mojando la punta en el chocolate templado y con mucho tacto dibujar poco a poco hasta que vayan adoptando la carita terrorífica; en esto los peques de la casa os podrán ayudar también y dejad que hagan los dibujos que mas les gusten. Feliz noche de halloween!!