Que difícil me resultó hacer a Sara y no por su elaboración sino porque, en la foto que me enviaron para hacerla, se veían muy mal todos los adornos. Y cuando preguntaba por tal o cual detalle lo que me explicaban no tenía mucho sentido con lo que a mí me parecía ver en la foto.
Uf.
Así que fui un poco a ciegas y me dejé llevar por lo que creí que mejor le quedaría a la fofucha.
Al final gustó mucho con lo que el trabajo mereció la pena.