Mi desahogo, una postal de frases para abuelos fallecidos.
Vuestras alas ya estaban listas para volar, pero mi corazón nunca estuvo listo para veros partir. Los abuelos nunca se mueren, sólo se vuelven invisibles. Siguen contigo, sólo debes escucharlos con el corazón. Os recuerdo y se llena mi alma de gozo por todo lo que me disteis mientras estuvisteis junto a mí.Y porque espero que allá donde estén, puedan ver lo importantes que han sido en mi vida. Que no se queden en el olvido, por lo que dedico mis frases para abuelos fallecidos que surgen de mi corazón.
No nos damos cuenta que la vida pasa, y un día cualquiera, al ser querido, al ser amado, la muerte tan fría, lo aparta de nuestro lado, y en un segundo, todo ha terminado.