LIDIA WYLANGOWSKA
A veces creo que el paraíso está en los sueños. Si muriera querría ir definitivamente a ese punto negro que queda en sus ojos.
Digamos la verdad: muchas veces deseamos cosas para las cuales no estamos preparados.
Desde el momento en el que pides un deseo hasta que éste se empieza a vislumbrar, pasa un tiempo durante el cual el deseo se nutre, se asienta y madura. Luego se materializa o desaparece.
Si yo fuera adicta sería adicta al ciber espacio. Lo soy?
La gente alrededor mío se mueve constantemente. Soy yo la que está quieta?
Qué carajo quiero hacer de mi vida? O ya es tarde para esta respuesta?
Me perdería en la ruta, bajaría el vidrio y dejaría que los rulos se vuelvan lacios con el viento.
No es acaso la felicidad, en parte desear y luego imprimir, teclear, estampar nuestros sueños en algún papel para dejarlo por ahí guardado?
Creo que hay personas que le tienen tanto miedo a los sueños que así como temen decirlos en voz alta, menos aún se atreven a escribirlos.
Nadie en su sano juicio debe toquetear el diario de los demás. Sería como querer abrir la cabeza de una persona con un hacha.
*Fuera de contexto es una recopilación de frases que voy encontrando en mis relatos diarios.