Revista Literatura

GALA DE PREMIOS XIX EDICIÓN: LO QUE EL VIENTO SE LLEVÓ de Margaret Mitchell

Publicado el 15 marzo 2020 por David Rubio Sánchez
GALA DE PREMIOS XIX EDICIÓN: LO QUE EL VIENTO SE LLEVÓ de Margaret Mitchell
   No quiero pensar en esto ahora. Me volveré loca si pienso ahora en que perderé a Rhett. ¡Pero no puedo dejarle marchar!   Tiene que haber algún medio para impedirlo…Escarlata O’Hara

GALA DE PREMIOS XIX EDICIÓN: LO QUE EL VIENTO SE LLEVÓ


  ¡Bienvenidos a una nueva Gala de Premios de El Tintero de Oro! En esta ocasión nos hemos trasladado hasta Tara, una plantación de algodón del sur de Georgia (USA), invitados gentilmente por cierta dama sureña que, al parecer, es una gran aficionada a la Literatura. Desde luego, es una mujer arrolladora que en las horas previas nos ha colmado de atenciones, simpatía y una fascinante conversación.
GALA DE PREMIOS XIX EDICIÓN: LO QUE EL VIENTO SE LLEVÓ de Margaret Mitchell
   Así que ya bien dispuestos en el salón de la mansión principal, con nuestros relatos bien a mano, ¡demos comienzo a la…!   —¡Ay, queridos míos! ¿Tendrían la enorme amabilidad de esperar un ratito más?    —Eh…, claro, señora O’Hara.   —¡Qué gentiles! ¡Se lo agradezco tanto! Miren, les propongo salir al porche. Ya está atardeciendo y seguro que no han visto nada tan hermoso en su vida.   Es una mujer a la que es difícil negarle algo, os lo aseguro. Así que permitirnos retrasar un instante nuestra ceremonia de premios y acompañemos a la señora O’Hara.   Desde luego, no exageraba, ¿verdad? Sobrecoge observar los muros blancos de la mansión de Tara, vestidos con el verdor de sus plantas, en contraste con el anaranjado cielo crepuscular de fondo, y sobre la alfombra de la roja tierra sureña. Las cortinillas blancas revolotean en las ventanas al ritmo de los macizos jazmines. El tiempo parece detenerse…   Pero no lo hace, así que sugerimos a la señora O’Hara que sería ya el momento de comenzar nuestra Gala. Ella asiente, pero al mismo tiempo eleva su mirada de ojos verdes hacia la avenida de oscuros cedros. Sus ojos brillan ansiosos, como si esperaran algo, o a alguien.   —¿Señora O’Hara?  —¡Oh, lo comprendo! ¡Discúlpenme! A veces me olvido de todo, sin darme cuenta que cada uno tiene sus necesidades.   Volvemos a entrar al salón y, una vez aposentados…. ¡Bienvenidos a una nueva…!  —¡Ay, queridos míos! ¡Ahora me doy cuenta de que no les mostré nuestra biblioteca! ¡Qué cabeza la mía! Por favor, solo serán unos minutos ¡Deseo tanto enseñarles nuestra colección!  —¿Qué…? Ejem, claro, señora O’Hara.  Disculpad esta nueva interrupción, ¡nuestra anfitriona es así! De todas formas, ¿quién sabe qué ejemplares maravillosos nos encontraremos en la biblioteca?  —Con lo antigua que es esta casa, ¿tienen por casualidad algún incunable?  —¡Oh! Seguro que habrá alguno de esos, ¡hay tantos libros en ella!
  La biblioteca, aunque con una decoración muy recargada, tampoco es que sea gran cosa en cuanto a libros se refiere. Mientras curioseamos por los estantes, un tanto polvorientos hay que decir, observamos que Escarlata se ha quedado en el umbral, con la mirada vuelta a la entrada. Definitivamente tiene una concepción del tiempo muy distinta a la nuestra.  De repente, suenan los golpes de una aldaba sobre la puerta. Escarlata O’Hara dibuja una enorme sonrisa en su rostro.  —¡Deseo tanto escuchar sus relatos! Vamos, dejen ya esos libros polvorientos. Tampoco son gran cosa. ¡Su audiencia debe estar ya tan impaciente!  Obedientes, seguimos a Escarlata de regreso al salón. Observamos que Mamita, la oronda y diligente empleada de hogar, se dirige a la puerta. Al abrirla, aparece un hombre alto, moreno y con un bigote de la época.  —Señor Butler, ¿cree que es de caballeros llegar tarde a una cita? —dice Mamita con un tono de reproche.  —Apreciada, Mamita, no exija a mi caballerosidad más de lo conveniente —dice el recién llegado que nada más entrar se nos queda mirando con la misma expresión de sorpresa con la que seguro nosotros le correspondemos.  Viste un traje elegante, pero ya arrugado y desaliñado. Su aspecto, sus ojos negros fatigados, nos sugieren a un verdadero galán al que el tiempo ya le ha comenzado a pasar factura.
GALA DE PREMIOS XIX EDICIÓN: LO QUE EL VIENTO SE LLEVÓ de Margaret Mitchell
  —¡Oh, Rhett! ¡Amor mío! ¡Mira quiénes nos han visitado! Son los participantes de un concurso literario que van a celebrar aquí su Gala y nos van a leer sus relatos. ¡No es maravilloso, Rhett!  —¿Y se puede saber desde cuándo te gusta a ti la literatura?   —¡Me alegra tanto verte! ¡Siéntate aquí! Junto a mí, como siempre debió ser.  —¡Es que nunca te das por vencida! ¡Es que tu orgullo es tan grande que hasta la humillación te parece aceptable para conseguir tu objetivo!  —Pero, Rhett, solo te pido unos minutos. No hace falta que me beses, me toques o me hables. Solo te pido, por el amor que en su día concibió a nuestra hija, que te sientes a mi lado y escuches los relatos que esta buena gente va a leernos.
  Bueno, mirad que nos hemos encontrado con situaciones raras a lo largo de estas ediciones, pero creo que es la primera vez que nos vemos envueltos en medio de una discusión de pareja. ¡Se puede cortar la tensión con un cuchillo!  —Esto, señora O’Hara, señor Butler… ¿podemos empezar nuestra Gala?  —¡Maldita sea! Hagan lo que tengan que hacer, que yo haré lo que mi educación y honor me obliga a consentir —dice el señor Butler sentándose al lado de Escarlata. Esta sonríe con cierta picardía.  Así que ahora sí, ¡bienvenidos a una nueva Gala de premios de El Tintero de Oro! En esta ocasión vamos a obsequiarles con veintiséis relatos románticos que a buen seguro acariciarán su alma y les hará comprender que nada como el Amor…  ¡Plof!  Es la silla del señor Butler que ha caído al suelo dado el ímpetu con el que el citado caballero se ha levantado.  —¡Pero qué encerrona es esta, Escarlata! ¿De verdad crees que con cuatro historias…?  —¡Veintiséis, amado mío!  —¡Como si son mil y una historias de amor! ¿Acaso piensas que mi decisión fue tan frágil que basta con una velada de cuentos inventados para que caiga rendido ante ti? No, querida. Toda mi vida estuve a tus pies, dejando que me pisaras con tus tacones de soberbia, esperando que te dieras cuenta de mi amor. Y ahora pretendes que olvide tus desprecios solo porque ahora has decidido que así sea.  —¡Oh, Rhett! ¡De verdad que no sabía sobre qué género literario versaban sus historias! Por favor, vida mía, quédate a mi lado y escúchalos junto a mí. Parte después adonde quieras sin ni siquiera decirme adios.
GALA DE PREMIOS XIX EDICIÓN: LO QUE EL VIENTO SE LLEVÓ de Margaret Mitchell
    El señor Butler resopla un instante. Hasta que finalmente recoge la silla del suelo y se vuelve a sentar. En esta ocasión, mejor empezar sin más preámbulos antes de que nos interrumpan de nuevo.     Y, aprovechando el silencio, Marta Navarro, Beri Dugo, Isabel Caballero, Estrella Amaranto, Beba Pihen, Raquel Peña, Mirna Gennaro, Paco López Castelao, Bruno Aguilar, Pepe de la Torre, David Serrano, Francisco Moroz, Carla Guerrero, Paola Panzieri, Juana Medina, Jorge Valín, Emerencia Alabarce, José R. Capel, Barry Byrne, Carmen Ferro, Mery Pérez, Mª Carmen Píriz, Irene Rodríguez, Ulises Castellano, Puri Otero y Araceli Rodríguez proceden a leer sus relatos.    Durante la lectura observamos a Escarlata mirando de reojo a Rhett, en ocasiones, deja caer el brazo cerca suyo, buscando un mínimo contacto que nunca es correspondido. Sin embargo, durante alguna de las historias hemos podido ver que sus ojos se humedecían. Quién sabe si por el romance escuchado o por el recuerdo provocado.   Al terminar, Rhett se levanta en silencio. Nos mira como dudando qué hacer. Al final nos saluda tímidamente con la mano antes de dirigirse a la puerta.  —¡Rhett! —exclama Escarlata yendo tras él—. ¿Te has dado cuenta? Sé que sí, he visto tus ojos enrojecidos, sé que la firmeza de tu decisión de abandonarme ya muestra resquicios. ¡Deja libre a tu corazón!  —No, querida. Esas lágrimas no eran por amor y mucho menos por ti. Ese tiempo ya pasó, se lo llevó el viento. Sé cuánto te amé y sé que eso nunca lo olvidaré, pero a nuestra historia ya le pusieron un punto final.  —¡Rhett! —Escarlata se arrodilla, agarrando al señor Butler por el faldón de la chaqueta—. No me dejes, ¿qué será de mí?  —Como te dije la última vez —concluyó Rhett desde la puerta—: francamente, querida, me importa un bledo.
  Puff…, tras el portazo con el que se ha despedido el señor Buttler, se ha instalado un silencio que cuesta romper. Por supuesto, ya éramos conscientes de que más que por un interés literario, habíamos sido utilizados por Escarlata para reblandecer el corazón de Rhett. Pero, a pesar de ello, no podíamos dejar de compadecerla viéndola de rodillas, con la vista clavada en la puerta.  —Ejem, señora O’Hara —decimos acercándonos a ella—. Lamentamos que nuestras historias no le hayan servido para nada.   Escarlata se pone en pie.  —No se apuren —dice mientras se pasa la mano por su vestido—. Soy yo la que les debe una disculpa.  —¿Cree que volverá?  —Por supuesto que sí —afirma levantado la cabeza y arqueando las cejas de un modo irresistible—. No ha habido un solo hombre al que no haya subyugado cuando me lo he propuesto.  —¿Cómo lo hará?  —Algo se me ocurrirá. Después de todo, mañana será otro día.

MENCIÓN HONORÍFICA

    DEL PUESTO DÉCIMO AL OCTAVO
10. Con 28 ptos. EL JUEGO DE LA SEDUCCIÓN (votado por 6 participantes), de Estrella Amaranto.9. Con 30 ptos. TIEMPOS DE CAMELIAS (votado por 7 participantes), de Carmen Ferro.8. Con 33 ptos. CARTA A DALILA (votado por 7 participantes), de Araceli Rodríguez.
  DEL PUESTO SÉPTIMO AL CUARTO     El número que aparece entre paréntesis se corresponde al total de participantes que otorgaron la puntuación correspondiente.
7. Con 35 ptos. LA POESIA Y EL AMOR, de José R. Capel. Ha sido votado por 10 participantes: 7 ptos. (0), 6 ptos (2), 5 ptos. (1), 4 ptos. (1), 3 ptos. (2), 2 ptos. (4), 1 ptos. (0)6. Con 36 ptos. SILENCIO, de Juana Medina. Ha sido votado por 14 participantes: 7 ptos. (0), 6 ptos (1), 5 ptos. (1), 4 ptos. (2), 3 ptos. (1), 2 ptos. (5), 1 ptos. (4)5. Con 49 ptos. MIARMA, de Paola Panzieri. Ha sido votado por 11 participantes: 7 ptos. (3), 6 ptos (1), 5 ptos. (0), 4 ptos. (2), 3 ptos. (3), 2 ptos. (0), 1 ptos. (2)4. Con 63 ptos. EL VALOR DE UNA VIDA, de Jorge Valín. Ha sido votado por 14 participantes: 7 ptos. (3), 6 ptos (2), 5 ptos. (2), 4 ptos. (2), 3 ptos. (3), 2 ptos. (1), 1 ptos. (1)
  Y llega el momento del podium de ganadores.
 Con 64 puntos se ha llevado el TINTERO DE BRONCE el relato LA ZAPATILLA DE IR POR CASA escrito por Pepe de la Torre, en su blog ENTRE UNAS CUATRO ESQUINAS.
GALA DE PREMIOS XIX EDICIÓN: LO QUE EL VIENTO SE LLEVÓ de Margaret Mitchell
  Este relato ha sido votado por 14 participantes:  7 ptos (3), 6 ptos (2), 5 ptos. (4), 4 ptos (0), 3 ptos. (3), 2 ptos (0), 1 ptos (2). Enhorabuena a Pepe por este reconocimiento que conlleva, además de este diploma digital que puedes colgar en tu blog, la publicación en la antología anual de EL TINTERO DE ORO.
    Con 70 puntos, se lleva el TINTERO DE PLATA el relato EL REGRESO DE MAMBRÚ, escrito por Paco López Castelao en su blog CASTRO ARGUL.


GALA DE PREMIOS XIX EDICIÓN: LO QUE EL VIENTO SE LLEVÓ de Margaret Mitchell

 Este relato ha sido votado por 15 participantes:  7 ptos. (3), 6 ptos. (4), 5 ptos. (3), 4 ptos. (1), 3 ptos. (0), 2 ptos. (2), 1 pto. (2). Enhorabuena a Paco por este reconocimiento que conlleva, además de este diploma digital que puedes colgar en tu blog, la publicación en la antología anual de EL TINTERO DE ORO.
   Con 81 puntos, el TINTERO DE ORO de febrero de 2020 corresponde a... VIENTOS DE GUERRA, escrito por ISABEL CABALLERO, en su blog TARA.

GALA DE PREMIOS XIX EDICIÓN: LO QUE EL VIENTO SE LLEVÓ de Margaret Mitchell
        Este relato ha sido votado por 15 participantes: 7 ptos (7), 6 ptos (3), 5 ptos. (1), 4 ptos (0), 3 ptos. (1), 2 ptos (2), 1 ptos (1). Enhorabuena a Isabel por este reconocimiento que conlleva, además de este diploma digital que puedes colgar en tu blog y la publicación en la antología anual de EL TINTERO DE ORO, la corrección profesional de Grisel R. Núñez, creadora del blog  CAFETERA DE LETRAS y una radio ficción en vídeo y archivo de audio dramatizada por Ramón Márquez, creador del blog NOVELESCO.



GALA DE PREMIOS XIX EDICIÓN: LO QUE EL VIENTO SE LLEVÓ de Margaret Mitchell

Gracias, Margaret, por inspirarnos

  Ojalá Escarlata y Rhett logren algún día la paz en sus corazones y consigan la felicidad que todos los lectores de Lo que el viento se llevó deseado.
  Abandonamos Tara con sabor agridulce, no solo por no haber conseguido la reconciliación de tan entrañable pareja, sino por la época complicada que nos está tocando vivir a causa de la pandemia del COVID-19. Desde El Tintero de Oro, os rogamos que toméis las precauciones que las autoridades sanitarias han recomendado y, sobre todo, evitad salir de casa en la medida de lo posible para evitar la propagación de este puñetero virus. Eso sí, quedarse en casa no significa que no podamos viajar y, además, hacerlo bien lejos...
  ¿Qué tal si preparamos una visita a Marte?


  XX Edición: CRÓNICAS MARCIANAS de Ray Bradbury


GALA DE PREMIOS XIX EDICIÓN: LO QUE EL VIENTO SE LLEVÓ de Margaret Mitchell
Para participar en la siguiente edición, vuestro relato debe seguir los siguientes requisitos:
TEMA: El relato deberá contar con, al menos, uno de estos requisitos (podéis elegir uno, dos o los tres):
  • Escribir una historia de ciencia ficción, ya sea viajes espaciales, colonización planetaria, robots, encuentros con extraterrestres...
  • Un relato en el que se mencione con sentido la novela Crónicas Marcianas o al autor, Ray Bradbury.
  • Un relato en el que la acción transcurra en un planeta inventado.
EXTENSIÓN: 900 palabras como máximo.
PUBLICACIÓN: Deberéis publicarlo en vuestro blog en este mes de marzo.
PARTICIPACIÓN: Para confirmar vuestra participación DEBERÉIS INSERTAR EL ENLACE A VUESTRO RELATO EN LOS COMENTARIOS DE ESTA ENTRADA.
PLAZO: Desde 15/03/2020 hasta el 31/03/2020
BASES COMPLETAS: AQUÍ
REVISTA DIGITAL: El Tintero de Oro Magazine del mes de marzo incluirá todos los relatos participantes.
  • Si quieres aportar una reseña de Crónicas Marcianas, una biografía o un artículo sobre RAY BRADBURY, podréis remitírmela al mail [email protected] hasta el 31 de marzo.

¡Saludos tinteros!

Volver a la Portada de Logo Paperblog

Revistas