Gestor

Publicado el 07 enero 2014 por Vicente Luis Mc

Los reyes no le habían traído nada, para disimular su resignación decidió seguir con sus estudios en los que llevaba un año inmerso, había decidido probar suerte en un mundo que parecía ser un mar de oportunidades.La denominación en ingles del asunto le resultaba de lo más curioso, prefería españolizarla y decir a quien quisiera escucharle que se estaba iniciando en el mundo de las redes sociales con fines empresariales y comerciales, una especie de relaciones publicas vía internet.Esa era la definición más acertada que había logrado encontrar después de mucho pensar cómo explicar a quienes le rodeaban, lo que estaba haciendo sin que les sonara demasiado a chino.No le estaba resultando fácil, pero tomo la determinación de seguir avanzando.Se lo tomo como un reto puramente personal, su objetivo era claro quería aprovechar el potencial de las redes sociales para dar a conocer sus habilidades profesionales y aquellas cosas en las que le habían insistido que podía destacar.Así que sin pensarlo demasiado y haciendo acopio de paciencia volvió a los textos destinados a la mercadotecnia aplicada a internet y a epitomes donde se hablaba de un concepto que le interesaba sobre todas las cosas, algo que los expertos llaman la marca personal.Mientras navegaba por las doscientas páginas de aquel libro, pensó esto es justo lo que he estado buscando como ser relaciones públicas de mi mismo.Después vinieron mas y mas escritos sobre promoción, posicionamiento y otros asuntos que parecían tener relación con aquello que ocupaba su tiempo.Ante él se había abierto un infinito universo de información del cual esperaba saber sacar provecho.Aquella tarde cayó en la cuenta que siempre había pecado de lo mismo su poco interés por promocionar lo que hacía, ya que lo consideraba un acto de egocentrismo.Llevaba demasiado tiempo viviendo en el error, se percato que ahora si hubiera conservado cosas que en su momento no tomo en cuenta, le hubieran abierto puertas, sin duda ya era demasiado tarde para lamentarse.Poco a poco fue entendiendo aquel universo donde hasta una fotografía también podía tener gran valor, entendió que un gestor de redes sociales podía serlo de una empresa o de un profesional independiente como era su caso.Comprendió perfectamente que aquella labor era una mezcla de tres conceptos, relaciones públicas, vendedor y jefe de producto, e incluso podía derivar en un cuarto que él no quería plantearse, al menos de momento.Había aprendido una lección muy importante debía venderse con ayuda de las nuevas tecnologías, en el momento que tuviera claro ese concepto podría ejercer sin miedo su nueva profesión.