Revista Diario

Gravity

Publicado el 23 noviembre 2013 por Dukespeaks

Dice el resumen de Cinépolis: "Durante una misión de rutina por el espacio, los astronautas Ryan Stone (Sandra Bullock) y Matt Kowalsky (George Clooney) sufren un imprevisto que destruye su nave, dejándolos solos en la oscuridad. Ambos se están quedando sin oxígeno y luchan por alguna oportunidad de sobrevivir."

Actores: George Clooney, Sandra Bullock, Eric Michels, Basher Savage.

He salido todo mareado de la función. Seguro a El Chivo Lubezki ahora sí le dan el Oscar (mejor fotografía). Es una película muy emotiva: el peor momento ocurre cuando la doctora Stone se llora porque nadie le enseñó a rezar. ¿Rezar? ¡Como si eso sirviera de algo! (Bueno, sí sirve: la creencia de un ser superior, eterno y omnipresente, ¡que nunca te abandona!, decididamente te calma los nervios, como bien supimos cuando se nos subió el muerto). El momento más delicioso es cuando le vemos las piernas a Sandra Bullock: debe tener más de 50 y luce muy bien, con una celulitis incipiente; tiene las piernas muy fuertes, como de corredora o nadadora, quizá hace las dos cosas de manera regular. Viéndola apretar botones y pensar en voz alta, me recuerda en su papel de programadora geeky en The Net (donde aparece tostándose al Sol en bikini). La sucesión de dificultades me llama a Apolo 13, que también me gustó mucho: ¡mi generación creció con los cohetes espaciales!. Recuerdo que Banco Serfin obsequiaba a los niños un modelo a escala del módulo de servicio, era fantástico.

16.01.2014: La academia anunció temprano por la mañana que sí, que Alfonso Cuarón y Emmanuel Lubezki están nominados al Oscar por .

Gracias a esas piernas fuertes, la doctora Stone logra ponerse en pie a la orilla del lago donde aterriza sana y salva. Es como ver a Eva en un paraje prehistórico: un verdadero renacimiento personal.


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