Greta

Greta

Los poderes económicos y mediáticos se han puesto de acuerdo para “destruir” a Greta. Saben que es un valor seguro contra el cambio climático.

Greta nos ha abierto los ojos a la realidad más dramática, que los políticos no han sabido gestionar. Greta, que cada viernes se sienta en las escaleras del Parlamento sueco para exigir a los diputados que luchen contra el cambio climático, contagió su lucha a los más jóvenes del mundo. #freedom for future.

Greta es nuestra conciencia.

Greta es una adolescente que padece el Síndrome de Asperger, un tipo de autismo. Se convierten en expertos en algún tema concreto, como es el cambio climático.

Sus padres, como todos, protegen y apoyan a su hija; no hicieron otra cosa.

El fenómeno Greta creció porque se hizo viral entre la juventud del mundo.

Greta nunca pretendió ser otra cosa que una niña preocupada por el cambio climático.

Esta niña ha dejado claro que lo único que pretende es dar un mensaje; no ser un ejemplo.

La potencia de su imagen y la necesidad social de crear referentes a cada momento, debe haber sido un plato goloso a explotar mediáticamente.

Debemos salvar a Greta de las garras, ya en acción, de los poderes económicos y mediáticos. Unos para banalizar su lucha contra ellos y otros como colaboradores necesarios.

Nosotros podemos cuidarla o destrozarla; habremos cumplido nuestro papel.

Yo la cuidaré como se hace con nuestros hijos. ¡Greta es nuestra conciencia!

PD. Este movimiento #Freedomforfuture es indestructible.

La Greta india nos lo enseña. Se llama Licypriya Kangujam y tiene ocho años.