Uno de los aspectos más importantes cuando hablamos sobre alimentos son nuestros hábitos higiénicos y es que como ya sabemos, los alimentos son productos perecederos, debido a todos los nutrientes que contienen, que tienen fecha de caducidad, a su elevada cantidad de agua y a su PH. Por lo tanto, son los microorganismos los principales agentes de alteración de los alimentos, y por su actuación, una de las principales causas que provocan las enfermedades de origen alimentario es la falta de higiene unida a distintos errores que podemos cometer.
Estos errores se pueden resumir en cuatro muy importantes que debemos tener en cuenta:
- La preparación de los alimentos con demasiada antelación a su consumo. Si además a esto le unimos una conservación a temperatura inadecuada, estamos provocando la situación más propicia para la multiplicación de los microorganismos.
- El consumo de alimentos crudos o que no han sufrido un tratamiento térmico suficiente, como para destruir o al menos reducir la cantidad de microbios que puedan tener.
- Nuestra propia higiene a la hora de manipular los alimentos. A veces cuando manipulamos los alimentos podemos ser portadores sanos de microorganismos patógenos que se transmiten a los alimentos que manipulamos y así podemos contaminar a nuestras familias y amigos.
- Influye y mucho, el diseño de las instalaciones, que impiden el circuito progresivo de los alimentos y que favorece un uso inadecuado de nuestros utensilios. Con ello lo que potenciamos es la posibilidad de contaminaciones cruzadas , es decir, de intercambio de contaminación entre alimentos crudos y cocidos, a través del contacto de las manos y/o de las superficies de trabajo.
Higiene al manipular alimentos
No podemos olvidar la vital importancia que tiene el higiene a la hora de manipular los alimentos. Unos simples gestos como los que incluimos a continuación pueden marcar la diferencia y evitarnos algún que otro disgusto.
- Lavarse las manos antes de cocinar
- Lavar los utensilios cuando los vayamos a usar para otro alimento.
- Las normas de conservación de alimentos.
- Especial cuidado entre alimentos crudos y cocidos como indicamos anteriormente.
Por último, os queremos recordar la importancia que tiene educar a nuestros hijos para que entiendan la importancia de la higiene alimentaria.