Hablamos de lacres

El tema de hoy es el lavado de los lacres. Para la primera pulsera no se me ocurrió la necesidad de su lavado, pero a medida que guardé algunos más noté cierto grado de suciedad. Empecé entonces a lavarlos rociándolos con desengrasante y agitándolos luego en abundante agua caliente. Pero al secarlos a veces hay alguno que sigue quedando sucio, y repito el proceso, pero con aquella sensacion de que esto en el lavaplatos no hubiéra quedado así. Más tarde, buscando por internet, encontré que los venden en paquetes enormes, aquí es donde te das cuenta de lo ridículo de los 20 lacres que tanto me cuesta reunir para hacer una pulsera. A lo que iba, los paquetes indican que se venden lavados, no es lo mismo lavar 20 que 5000, se me antojó que lo deben hacer a máquina.
En el anterior lavado de mi lavaplatos metí un par de lacres junto a los cubiertos y el resultado parece estupendo, así que hoy puse una buena cantidad de lacres que me guardó mi hermano.
El resultado es que parte de los lacres han viajado por todo el lavaplatos, espero que no sé haya fastidiado nada, y he notado que unos pocos han quedado bien, la mayoría han quedado mates y un montón han quedado marronosos.Imagino que hay diversos factores que intervienen en el resultado, entre ellos la calidad del material, el programa elegido y la situación dentro del cesto de los cubiertos, pero salvo que alguien me explique otra manera lo seguiré haciendo a mano.