No recuerdo tan buena sensación de mi vista al Museo de la Evolución Humana de Burgos. En su página WEB, ofrecían la posibilidad de visitar el yacimiento tanto con reserva previa como con reserva en el propio museo, y al llegar allí nos dijeron que era imposible la visita sin haber reservado con antelación. Nos quedamos sin ver el yacimiento… otra vez será. Casi se acostumbra uno en España a que las cosas no estén abiertas cuando debieran (en Zaragoza se han ofertado museos que están cerrados o que no se pueden visitar) o que la información de la WEB no sea todo lo fiable que debiera. (la exposición de Darwin en la universidad, cuyo último día era un sábado estaba cerrada como sospechaba).
Por lo demás el museo es demasiado moderno para mi gusto, grandes espacios y pocas piezas, aunque me sorprendió gratamente que se hubiese guardado un espacio dedicado a Darwin con su reconstrucción del Beagle. Sí que vimos las “piezas estrella” como la pelvis “Elvis”, el cráneo 5 o de “Miguelón” o la cara incompleta de H. antecessor, (además de volver a ver una réplica en el Museo Provincial), pero la verdad es que yo me quedé con ganas de ver alguna cosa más. La relevancia que tiene Atapuerca justificaría la exposición de más piezas, aunque fuesen réplicas. Personalmente no llevo demasiado bien la incursión de las pantallas, la oscuridad en los museos y el gasto desorbitado en un edificio cuyo valor máximo es lo que está dentro. Disfruto más en sitios como el Museo de Anatomía Comparada de París. Aunque el edificio, viejo como muchos en Francia mostraba bastantes cicatrices de goteras, el interior estaba repleto de osamentas. Lo mismo me ha ocurrido en otros museos que aunque pequeños, mostraban una gran cantidad de contenidos.
Salvando la distancia, me gustó más el Museo Provincial de Burgos, puesto que era un museo a la vieja usanza, vitrinas repletas de cosas para ver. En el Museo de Zaragoza han decidido amputar salvajemente la parte dedicada a la arqueología y para mí ha perdido gran interés.
Centrándome en lo que quería contar, cuando más o menos diseñé el contenido del taller sobre la prehistoria, el primer taller lo hice en el aula de la escuela primaria de Lucía, mi hija menor. Durante un rato, los niños vieron en la clase la amplitud del tiempo de la Tierra de modo tangible, no con un recuadro pequeño que aparece en el libro y que nunca está a escala. Cómo se trabaja un hueso con lascas de sílex recién extraídas o cómo podemos hacer fuego mediante chispa y hongo yesquero. En otro taller, el fuego lo hicimos por medio de fricción con palos.El sílex que recojo de los montes próximos a Zaragoza, presenta nódulos de pequeño tamaño, o éstos son demasiado planos, por lo que la obtención de lascas no se produce demasiado bien. Para raer un hueso o cortarlo a puro de fricción mediante una pequeña lasca dentada, no es necesario que las lajas sean demasiado grandes, pero no es buen material para extraer lajas que permitan construir flechas. Es por eso, que visitando un día un vídeo en la red y viendo cómo es posible hacer puntas de flecha en vidrio, decidí que ese era el material que debía utilizar. La práctica hace que las flechas sean bastante dignas y que se pase el gusanillo del tallado. Para aquellos que quieran practicar,decidí que un día haría una entrada con fotografías del porceso. Un compañero de trabajo, David Bardavío, me dijo que lo mejor era hacer un vídeo y subirlo a YOUTUBE. Tomada la palabra, aquí lo tenéis. En mi ordenador se para pero es que quizá ya es algo viejo el pobre.
Hoy, por fin como os digo, junto con mi hija Lucía a la cámara hemos hecho un vídeo demostrativo de la talla de puntas de flecha en vidrio. El vidrio es de una botella de cerveza ambar. Una cerveza típica de Zaragoza que lamentablemente no tiene la difusión de otras cervezas de (pienso) inferior calidad. Para los efectos de la fabricación de flechas vale cualquier otra botella, ya sea de cerveza o vino pero de "culo" plano.Espero que os guste el vídeo, pese a que se nota desde muy lejos que es el primero que hacemos. Además he visto que no se lo pongo muy fácil debido a que sin previo aviso mis manos salen del tiro de la cámara en alguna ocasión. En cualquier caso, el vídeo no sería posible sin su colaboración, ayuda que me presta siempre que se la pido.
Aquí el enlace al vídeo http://www.youtube.com/watch?v=2fvRC_Kkqf8&feature=youtu.be
El proceso, lo relato a continuación.
- Extraer el culo de la botella, para lo que neceitamos un clavo de unos 15cm. Se introduce el clavo con la cabeza hacia abajo y se agita la botella de modo que el clavo golpe el fondo de la botella.
- Una vez extraído el "culo" de la botella, se va golpeando a lo largo de todo el perímetro hasta dejar un trozo rectangular de vidrio.
- Por medio de presión sobre la arista del vidrio más alejada del cuerpo, la que está apoyada sobre la piel que proteje la pierna, se consiguen extraer pequeños trozos que se llevan consigo una parte se la superficie del vidrio que descansa sobre la pierna, dejando así un tallado que va desde el centro de la flecha más grueso hacia el filo, más estrecho.
- Imaginación y diseño al poder...